Page 126 - Descripcion histrica y cronolgica de las dos piedras : que con ocasion del nuevo empedrado que se est formando en la Plaza Principal de Mxico, se hallaron en ella el ao de 1790. Explcase el sistema de los calendarios de los indios, el mtodo que tenian de dividir el tiempo, y la correcion que hacian de l para igualar el ao civil, de que usaban, con el ao solar trpico. Noticia muy necesaria para la perfecta inteligencia de la segunda piedra: que se aaden otras curiosas instructivas sobre la mitologa de los mexicanos, sobre su astronoma, y sobre los ritos y ceremonias que acostumbraban en tiempo de su gentilidad.
P. 126

suponiendo haber sido. 4e, un$ figura regular, como un parale-
                           lepipedp, según ella misma está demostrando.
                             8.2.  Enquanto  al modo como, la con4ucirian  , los Indios
                           desde el lugar de su nacimie.nto  t^ast^ el sitio donde se halló,
                                                    5
                           confieso. que no. lo alcanzo; pero sí aseguro, que en todas  sus,
                           obras buscaban, siempre,  ¡jos ropd.osmas, sencillos y fáciles de
                           ejecutarlas;  sirviéndose de máquinas, é instrumentos tan sim-
                           tíg& $$BWÍhé$§  q-Vec^ta^d^banjXpnservado su uso, que
                           rio  les. aumentaba peso, el .volumen, y. resistencia de  las mismas
                           maquinas;  ni  se les dificultaban, las operaciones, por necesitar
                           para ellas usar de varios instrumentos; acomodándose siempre
                           á executar, con uno  splo^ Ip, mismo que. otros Artífices hacen
                           con muchos. Admira ver hender un trozo de madera con tanta
                           igualdad,, y tan estrechamente, que apenas se conocen  las divi-
                           siones, con una sola piedra, en forma de cuña, y. otra que les
                           sirve de martillo, como se observa para fabricar los que llaman
          r                Tajamaniles^ que son unas láminas bien delgadas de madera, co-
                           njo. todos saben. El uso deja palanca, y del hypo.mpclion estu-
                                             i
                           vo entre  ellos muy familiar, y tenían, en su idioma términos
                           propios, con que. se conocían. Supieron suplir la faltade. car-
                           ros, y otras máquinas de ruedas, con unos cilindros  sueltos de
                           madera; por medio de  los quaíes. conducían, y ., anualmente
                           conducen, á crecidas distancias, los cuerpos mas pesados y^vo-
                           luminosos, solo con  ir mudando  los, cilindros* De otras ppera-_
                                                                  (   ;
                           cipnes naturales,, y sencillas sedará noticia en la Historia gene?.,
                                                                       ;
                           raí que tengo comenzada, si lograre tiempo para cpnc|triría, yv
                           proporción de que salga á la iuz pública.
                            .'  %  Si[lograre > este pequeño Tratada, la aprobación, del P^/úo,
                           y se sacaren los costos déla impresión y Láminas;^ se.darú^luzsu
                                                       v
                           Continuación, explicando  las dos nuevas Piedras que se hallaron
                           posteriormente y los demás monumentos %ue- se descubrieren ena^e*
                                      ,
                           lante¿ con sus Láminas respetivas*










            ,1
   121   122   123   124   125   126   127   128   129   130   131