Page 224 - El Orinoco, ilustrado, y defendido, historia natural, civil, y geographica de este gran rio, y de sus caudalosas vertientes: govierno, usos, y costumbres de los Indios sus habitadores con nuevas, y utiles noticias de animales, arboles, frutos, aceytes, resinas, yervas, y raices medicinales
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21 o EL' ORINOCO ILUSTRADO, _

                               gero a fus pies; y por fer fu color de tierra;
         Como fe efcó-
         den dentro de         ni la ve , ni la diilingue ; efto es, quando
         si miítBas.           ella efta tendida a lo largo ; pero quando fe


                               recoge enrofcada dentro de si miima , fe ha¬

                               ce mas incógnita , porque ar qualquiera le

                               parece que es una bolla de buey ya feca, y

                               defcolorida a los rigores del Sol, y del tiem¬

                               po : no fe puede percibir, ni entender, como

                               una culebra larga fe efconde entre fus mift

                               mos dobleces, y queda encogida , al modo

                               que folemos recoger la calceta , ó la media,

                               para calzárnosla con mas facilidad. No he

                               vifto fus huellos; pero imagino , que el efpí-j

                               nazo , que en las demas culebras , y animad¬

                               les fe compone de junturas , que permiten al¬

                               gún juego , y declinación del cuerpo de uno

                               a otro lado , en la Culebra Sibacdn , no fon

                               junturas, fino , ó gonces , o cañutos de huef-

                               fo, que al tiempo de recogerle , o (digamof-;

                               lo afsi ) de amontonarfe , fe entran unos den-:

                               tro de otros : fea como fe fuere , ella afsi re-i

                               cogida , íe defembuelve > y da tan ligero-


            Feroz frito,       falto al mifmo tiempo, que alcanza al pe-¡
         que dan para          cho del caminante , fi va a pie ; y junto a la
         herir.
                               rodilla , fi va a cavallo , con gran riefgo de

                               uno, y de otro , porque la ponzoña es mor-i

                               tal. La fortuna es , quede efta péfima efpe-3

                               cíe de culebras , no hay , ni en loque Uama4

                               mos tierra fria, ( efto es, cerca de los para¬

                               mos , y picachos nevados) ni en lo que lia-*

                               mamos, y realmente es, tierra perpetúame^

                               te calida: ( eftas fon las tierras , que diftant

                               largas leguas de las cordilleras nevadas) folo

                                                                                                           vi-
                                                              _ — v.
                                                                           ■ i


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