Page 91 - Punto de Fuga_2_Neat
P. 91
Sin abrir la boca, guardando su secreto como un cura,
una confesión, llamó a una amiga. A esa que no estaba en las
fotos de su hall, a esta que no había tomado ninguna
comunión, solo vinos y birras. Llamó a esa que consideraba un
poco trola y sin valores.
-Ana. ¿Cómo estás?
-¿Qué te pasó, Caro? No te escucho bien. Bah. De
hecho, me llamas siempre cuando te pasa algo. Decime
sin rodeos, ni frases boludas.
-Estoy embarazada, Ana. No le voy a decir a mi
marido. Pasame el contacto de ese médico que conoces
vos.
-Amiga, quédate tranquila. ¿Pensaste de dónde vas a
sacar la plata? Porque si no le decís a tu marido… Es
mucha guita, boluda. Posta, yo te puedo prestar. Pero
no seas soreta y jurame por tu dios, los evangelios y el
sorongo que quieras, que me la vas a devolver ni bien
puedas.
90