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ACTUALIDAD
Conpes 3977 para el periodo 2020 – 2025. Además, durante la pandemia, con el
Conpes 4002, el Gobierno Nacional destinó $3,9 billones al sector y a la economía, en
general, para el Frech No VIS, cuya vigencia va del 2020 al 2022. Así, el DNP cumple,
precisamente, la función constitucional de hacer seguimiento y evaluación; de he-
cho, el sector vivienda cuenta con 15 evaluaciones de impacto”.
MI CASA YA, UN LOGRO DEMOSTRABLE QUE DEBE TENER CONTINUIDAD:
HERNANDO JOSÉ GÓMEZ, PRESIDENTE DE LA ASOBANCARIA
“La coordinación de los sectores público, privado y financiero ha sido
importante para trazarle una hoja de ruta eficiente al sector. A las
familias se les ayuda a lograr el cierre financiero; además, se in-
crementa la demanda efectiva y la capacidad de los hogares,
pues, en muchos casos, pagan la mitad de la obligación. Por
eso, mantener en el tiempo un programa como MCY es un
logro demostrable, que debe tener la continuidad. Ade-
más, se ha acompañado a las familias y de 26.000 crédi-
tos en 2020 se pasó a más de 53.000 el año pasado, que
se destinan a complementar el programa.
Incluso, en 2021 sumamos 76.000 desembolsos, que
superaron los de mediados de la década pasada. Esto
demuestra el gran ejercicio que han hecho los bancos;
por su parte, la cartera VIS llegó a los $19,7 billones al
2021, montos de grandes ligas para un crecimiento de
17% en el último año. Y debemos recordar que la dispo-
nibilidad de subsidios se combina con tasas de interés ba-
jas de 10,78% para VIS.
22 Y como se prevé un consumo futuro de subsidios de MCY cerca-
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no a 60.000 por año, esto implicaría un esfuerzo presupuestal de
$1,4 billones en subsidio directo y de $1,7 billones para cobertura,
aproximadamente”.
SUMAR ESFUERZOS HA SIDO DETERMINANTE:
CARLOS RUIZ, VICEMINISTRO DE VIVIENDA
“Con corte al 21 de enero, el programa MCY había beneficiado a más de
163 mil familias en el país y lo que vemos es que el ritmo de asigna-
ciones semanales tiene una dinámica interesante. De hecho, en
el 2019 fue de 624 y en el 2020, de 867; sin embargo, el año
pasado se superó ese promedio y pasamos a 1.291.
A esto hay que agregarle la posibilidad de tener escala y
llegar a más regiones, entendiendo cómo los programas
de oferta requieren un trabajo dispendioso, pero que va
en la dirección correcta; aun así, MCY ha logrado una
distribución de roles importantes de los diferentes ries-
gos de quienes participan en el proceso, entre ellos, los
constructores, el sector financiero y el Gobierno Nacio-
nal.
En la focalización también se está haciendo un trabajo
interesante, y, claro, será importante sumar esfuerzos,
como lo hacemos con las cajas de compensación a través
del subsidio concurrente y con muchas entidades territoria-
les, donde la idea es que le destinen recursos a MCY para en-
frentar los retos que tenemos en los territorios”.