Page 104 - prueba
P. 104
sus aletas traslúcidas elevadas hacia el cielo,
como congregantes en una oración extrate-
rrestre. Nueve de las 22 hileras de la colección
principal son miembros de la familia Cyprinidae,
que en su mayoría son carpas.
Es el muestrario de peces más grande del mun-
do, título que viene con un asterisco.
“Es en realidad la colección poslarval de mayor
tamaño”, explica Justin Mann, de 38 años y encar-
gado de la colección, quien pasa mucho tiempo
combatiendo el moho que se esparce una y otra vez
por las paredes interiores. Contiene el mayor nú-
mero de especímenes, añade, no de especies. De
hecho, más de un millón de ejemplares pertenece
a una sola especie, Cyprinella venusta. La colec-
ción incluye forasteros de lugares tan remotos
UNA COLECCIÓN de historia natural como salida como Indonesia. Pero la mayoría de los peces ahí
del sueño de un director de cine de terror y la eran originarios del sureste estadounidense, desde
encuentras si conduces por un sendero de terra- la costa del golfo en Texas hasta las Carolinas.
cería llamado Wild Boar Road unos 15 kilómetros La colección de Tulane tenía solo dos peces di-
hacia el sureste de Nueva Orleans, hasta un te- secados cuando un ictiólogo ambicioso llamado
rreno que es parte pantano y parte selva, en un Royal D. Suttkus llegó en 1950. Suttkus se propuso
recodo del río Misisipi. Caimanes y serpientes cambiar eso, con la premisa de que no es posible
acuáticas habitan el bosque enmarañado a la entender el mundo acuático a menos que lo pue-
izquierda. A la derecha se yergue el polvorín A3, das ver y estudiar, y de que no tiendes a proteger
con sus flancos bien reforzados contra el riesgo lo que no puedes entender. Suttkus fue un biólo-
de una explosión y su muelle de carga resque- go de campo que se metió hasta el cuello en las
brajado e inclinado hacia adelante. aguas de la región durante los siguientes 50 años:
Hay26depósitoscomoese,distribuidosamplia- sostenía un extremo de una red de cerco de tres
mente por la propiedad de unas 160 hectáreas, metros, mientras que en el otro extremo un estu-
en su mayoría abandonados. Durante la Segunda diante de posgrado trataba de mantener el paso.
Guerra Mundial, naves de la armada estadou- Otros ictiólogos a menudo van de lugar en lugar,
nidense se detenían ahí para recoger obuses an- recolectan un poco aquí y un poco allá, siempre
tes de hacerse a la mar. en busca de algo nuevo e interesante. Pero Sut-
En la actualidad, el lugar es propiedad de la tkus, quien murió en 2009, realizó muestreos en
UniversidadTulaneylosvisitantessuelenserbió- los mismos sitios de los mismos ríos año tras año
logos atraídos por los casi ocho millones de peces durante décadas, y a menudo llevaba a cabo son-
muertos que albergan los polvorines A3 y A15. deos obligatorios de impacto ambiental para
En su interior, los peces se remojan en alcohol fábricas de papel y otras industrias contaminan-
en frascos de distintos tamaños herméticamen- tes. La práctica habitual para los ictiólogos es
te sellados, alineados en estantes de hasta tres extender la pesca al final del tramo en la que se
metros de alto que se extienden hilera tras hilera obtuvo, elegir algunos peces que vale la pena
a lo largo de 11 metros. Algunos especímenes son conservar y dejar libre el resto. Pero para Suttkus,
estrafalarios. Un par de docenas de peces espá- la regla era que todo lo que estaba en su red aca-
tula se apiñan en un vitrolero de 19 litros, con baba en un frasco.
102 NATIONAL GE OGR APHIC