Page 9 - Revista Nuevos Aires de Bolívar (Nº 18)

Nuevos Aires
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El caso de May no ha sido el único caso
en la historia de los correos humanos...

Entre los más conocidos se destaca el Más cercano en el tiempo se dio el caso
que aconteció muchos años atrás, en 1849, de Charles McKinley, que quería visitar a
cuando Henry “Box” Brown decidió esca- su familia ubicada en Texas aprovechan-
parse de las dolientes cadenas que lo do sus vacaciones.
mantenían en la inhumana esclavitud.
En septiembre de 2003 repitió la histo-
Para cumplir con su propósito de inde- ria enviándose por correo a sí mismo en
pendencia, antes tuvo que meterse y aco- una caja, pero en este caso en un avión
modarse en una pequeña caja de madera que iría desde Nueva York hasta Dallas.
y, con la ayuda de las redes abolicionistas
del momento, se envió a sí mismo por Fue apresado luego que un repartidor
correo a la ciudad de Filadelfia. llamó a la policía diciendo que “unos ojos
lo miraban desde el interior de una caja”.
Pasó unas interminables 26 horas en el
interior de esa encomienda de escasas
proporciones, realizando un viaje de 440
kilómetros hasta llegar a su destino que lo
esperaba con un mejor trato de vida. An-
tes aguantó con coraje los calambres y la
sensación de ahogo que se presentaba,
pero sabiendo que una vez que saliera,
respiraría el hermoso aire de la libertad.