Page 26 - Secundaria - Comprometid@s con la Historia de México - 3er Grado
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                                             Tepetl, cerro o lugar de
Numerales del 1 al 13, cada signo representa un año
Figura 1.7
Xiumamalhuaztli, instrumento precioso para encender el fuego
Escudo, señal de guerra
Las huellas alrede- dor significan que lucharon contra
distintos grupos Guerreros (ojos cerrados, sig- nifica que han muerto)
Acatli, carrizo
Totchtli, conejo
Calli, casa
Tecpatl, cuchillo de pedernal
Malinalco, lugar de hierba
Hombre mexica (pies descalzos indican que pertenece a la nobleza)
Río
Gente muerta por epidemia
ciudades dominadas por ella estuvieron Yagul y Cuilapan. Monte Albán fue construida en la punta de una montaña; incluía pirámides, templos, una gran plaza, un observatorio as- tronómico y casas para sus pobladores y para sus dirigentes (sacerdotes y funcionarios) y sus familias.
Esta ciudad intercambiaba mercancías con teotihuacanos y mayas. Con ellos tam- bién intercambió conocimientos astronómi- cos, científicos, artísticos, etcétera. Entre las obras artísticas de Monte Albán destacan los objetos de cerámica, jade, barro y otros mate- riales empleados en entierros y tumbas. Hay estudios arqueológicos que calculan que en su época de esplendor Monte Albán llegó a albergar hasta 20 mil habitantes. Al igual que con Teotihuacan, se desconocen las razones ciertas de la caída de Monte Albán; causas supuestas son invasiones por parte de grupos venidos de fuera y rebeliones provocadas por una sobrepoblación imposible de sostener.
Y siguen los mixtecos. Mientras los za- potecos dominaban gran parte de la región de los valles centrales de la actual Oaxaca, los mixtecos vivían en la sierra a fin de evitar el dominio zapoteco. Sin embargo, cuando
            Reproducción de una lámina del códice Tira de la peregrina- ción, también llamado Códice Boturini. Este códice narra un tramo del trayecto que siguió el pueblo mexica hacia el lago de Texcoco.
         Monte Albán declinó, los mixtecos comenzaron a dominar las ciudades antes controladas por los zapotecos y se con- virtieron en el poderío de gran parte de la zona oaxaqueña durante el horizonte posclásico. Los mixtecos, a diferencia de los zapotecos, no tuvieron una ciudad única que controlara un territorio; antes bien, tenían varias que se unían para hacer la guerra a los enemigos. Entre ellas destacó Mitla.
Los mixtecos heredaron muchos de los conocimientos zapotecos, como su calendario y su sistema de numera- ción. Fueron grandes en la pintura, como lo demuestran los códices que han llegado hasta nosotros, el Borgia y el Nutall, por ejemplo. Otros logros artísticos de los mixtecas fueron los objetos de metal, pues fueron ellos los primeros mesoamericanos en dominar el trabajo con metales preciosos, principalmente el oro. El poderío mixteca duró alrede- dor de 500 años, hasta que fueron dominados por los mexicas antes de la llegada de los españoles. Sus descendientes, los actuales indígenas mixtecos, aún continúan viviendo en la sierra del estado de Oaxaca.
Finalmente, los señoríos mayas. Los mayas no tuvieron una ciudad principal; antes bien, en toda el área maya fundaron muchas ciudades independientes entre sí. Cada ciudad y varios poblados circunvecinos dominados por ella estaban gobernados, no por un rey, sino por un señor; de ahí que no se hable de reinos mayas, sino de señoríos mayas.
El gobernante de cada señorío se llamaba halach uinik (“hombre verdadero”); perte- necía a una familia con el mismo apellido paterno o materno cuyos miembros eran considerados descendientes de los dioses y gobernaba ayudado por un consejo de
ancianos nobles. El poder era heredado a los hijos varones.
Bellas y famosas ciudades mayas fueron Chichén Itzá, Tikal, Palenque, Copán.
Los mayas comerciaban, y no sólo tierra adentro, sino también por mar (aunque no tenían grandes embarcaciones, recorrían en ágiles canoas las costas de la península de Yucatán y de Centroamérica). En sus puntos de venta posicionaban, entre otros productos, cacao, sal, chile, jade, pieles, conchas marinas, plumas de aves como el quetzal y la guacamaya. Los señores mayas extendieron su influencia y poderío re- curriendo a dos métodos tan antiguos y universales como el amor y el desamor: las guerras y las alianzas matrimoniales (o matrimonios por conveniencia). Su fuerza y prestigio dependían de la cantidad e importancia de sus conquistas. Todas las
ciudades mayas poseen inscripciones que celebran sus victorias militares.
Usaban dos calendarios, el agrícola, llamado haab, y el ritual, o tzolkin; am- bos coincidían cada 52 años. El año maya constaba de 365 días; 20 días formaban
un mes.
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8 El códice Borgia: ¡Un
botón de muestra de la maestría de los dibujantes mixtecos!
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