Page 194 - Secundaria - Química 3er Grado

Tratamiento de residuos
En esta actividad se generan residuos ácidos y básicos, los cuales se deben neutralizar y diluir con agua antes de desecharse. Los demás son residuos generales, los cuales no representan riesgo para la salud humana, animal o el medio ambiente y no requieren de un manejo especial.
Para saber más
Escucha en línea un audio del Departamento de Ciencias Analíticas de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) de España, de una entrevista donde se revisan aspectos de la lluvia ácida.
CANAL/UNED Audio. La lluvia ácida y el efecto invernadero.
http://canal.uned. es/mmobj/index/ id/4063(Consulta: 4 de julio de 2016).
Como has aprendido, hay muchas sustancias ácidas y básicas que no nos hacen daño; sin embargo, hay otras que sí, por lo que hay que trabajarlas de forma segura. Un ejemplo son los ácidos fuertes, entre los que se encuentran los ácidos clorhídrico, sulfúrico y nítrico. Son ácidos fuertes porque son electrólitos fuertes, es decir, se diso- cian totalmente, lo cual los hace sustancias peligrosas. En el caso de las bases comunes están los hidróxidos de potasio y de sodio, que son bases fuertes.
Los ácidos y bases no peligrosos son electrólitos débiles, es decir, están parcial- mente disociados y son las sustancias ácidas y básicas que usamos en nuestra alimen- tación, salud, higiene personal, etcétera.
Detectives de la Química
Es importante que complementes la información con diversas actividades y ejercicios. Por ello te sugerimos que veas el video El protón en la Química de la colección El mundo de la Química, volumen III, si es que lo tienen en tu escuela. En caso contrario, te proponemos que busques videos relacionados con el tema de ácidos y bases en internet,
con los cuales complementes tus conocimientos.
La lluvia ácida
La lluvia es ligeramente ácida. Su pH es aproximadamente 5.6 porque contiene, di- suelto, dióxido de carbono de la atmósfera. La acidez del agua de lluvia empieza a ser preocupante cuando el pH es inferior a 5.6. Entonces se habla de lluvia ácida.
En general se admite que esta acidificación se debe a los óxidos de azufre y de nitrógeno presentes en la atmósfera a consecuencia de los procesos de combustión.
La mayor fuente de óxidos de azufre la constituye la combustión de carbón y pe- tróleo en las centrales que generan electricidad. Ambos contienen pequeños porcenta- jes de azufre (1 a 3%), en gran parte en forma de minerales. Los procesos metalúrgicos constituyen una fuente principal de óxidos de azufre. La cantidad de óxido de azufre procedente de fuentes naturales es muy pequeña (erupciones volcánicas). El dióxido de azufre se oxida en la atmósfera a trióxido de azufre que reacciona con gotas de agua formando ácido sulfúrico diluido.
Los óxidos de nitrógeno se generan fundamentalmente cuando se queman combus- tibles a altas temperaturas, como resultado de la combinación de nitrógeno atmosféri- co y oxígeno. Los medios de transporte son fuente importante de óxidos de nitrógeno y también se producen en los incendios forestales y las quemas agrícolas. Como fuente natural de los óxidos de nitrógeno podemos mencionar la formación de NO a partir de la descomposición de compuestos nitrogenados, debida a la actividad bacteriana en el suelo. En el aire, el NO se convierte lentamente en NO2, que reacciona con gotas de agua de lluvia para formar una solución de ácido nítrico.
La importancia relativa de la contribución del ácido sulfúrico (70%) y el ácido nítrico (30%) al contenido de la lluvia ácida no es constante. Además, los óxidos de azufre y nitróge- no pueden desplazarse a considerables distancias antes de combinarse con el agua y
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