Page 25 - Historia de la civilización peruana contemplada en sus tres etapas clásicas de Tiahuanaco, Hattun Colla y el Cuzco, precedida de un ensayo de determinación de "la ley de translación" de las civilizaciones americanas
P. 25

HISTORIA DE   LA  CIVILIZACIÓN PERUANA         21

       Según nuestro entender  la civilización de que Tiahuanaco
  iué centro litúrgico  y  cultural no fué ni espontáneo, ni indígena,
   en el sentido de haber sido concebida  y  elevada a potencia en el
   lugar en que se manifestó su acción continental.
       Según nuestro entender ella no fué la obra casual, limitada,
  y  forzosamente efímera, de un puñado de hombres de ignota pro-
   cedencia, cuya actuación resulta inexplicable si omitimos relacio-
   narla con un abolengo cultural más caracterizado.
       Según nuestro entender ella no pudo ser ajena al movimiento
   civilizador universal que todo lo fecundó a su paso desde las ori-
   llas del mar de la China hasta las márgenes de la mamacocha de
   ios Incas.
       Según nuestro entender  ella fué concebida a no menos de
   mil millas geográficas de distancia de la meseta andina en que
   se manifestaron sus efectos; queremos decir en la extremidad de
   un continente americano más extenso hacia Oriente que   el de
   nuestros  días,  del cual puede que dependiese  la desaparecida
   Atlántida,  y  dió sus primeros frutos en los momentos en que, con
   germinación sincrónica, daban los suyos propios las civilizaciones
   asiática, africana  y  europea.
       Nacida, según dejamos insinuado, a orillas del Atlántico, po-
   siblemente a la altura de la isla de Fernando de Noronha,  si es
   que no a la de las islas de San Pablo, Asunción  y  Martín Yaz,
   residuos posibles de la legendaria Atlántida, la misma se replegó
   violentamente tierras adentro, cuando los cataclismos que amaga-
   ron al primitivo continente americano, provocados por el hundi-
   miento de la corteza terrestre oriental, provocado a su vez por el
   paulatino levantamiento de la cordillera de los Andes en Occi-
   dente, obligaron a las humanidades primordiales americanas a
   huir de Oriente a Occidente, iniciando en tal forma una migra-
   ción milenaria de razas, de estirpes  y  de culturas cuya etapa fué
   Tiahuanaco, por lo que concierne a la raza que de embriocollagua
   atlántica, pasó a llamarse protocollagua en su debida sazón, para
   serlo, sucesivamente Hattun Colla  y  el Cuzco.
   20   21   22   23   24   25   26   27   28   29   30