Page 1515 - Spanish Bible (Reina Valera 1960)
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1511 Hechos 16. 29–17. 7
mal, pues todos estamos aquí. Él entonces, pidiendo luz, se 29
precipitó adentro, y temblando, se postró a los pies de Pablo y
de Silas; y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para 30
ser salvo? Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás 31
salvo, tú y tu casa. Y le hablaron la palabra del Señor a él y a 32
todos los que estaban en su casa. Y él, tomándolos en aquella 33
misma hora de la noche, les lavó las heridas; y en seguida se
bautizó él con todos los suyos. Y llevándolos a su casa, les 34
puso la mesa; y se regocijó con toda su casa de haber creído a
Dios. Cuando fue de día, los magistrados enviaron alguaciles 35
a decir: Suelta a aquellos hombres. Y el carcelero hizo saber 36
estas palabras a Pablo: Los magistrados han mandado a de-
cir que se os suelte; así que ahora salid, y marchaos en paz.
Pero Pablo les dijo: Después de azotarnos públicamente sin 37
sentencia judicial, siendo ciudadanos romanos, nos echaron en
la cárcel, ¿y ahora nos echan encubiertamente? No, por cierto,
sino vengan ellos mismos a sacarnos. Y los alguaciles hicie- 38
ron saber estas palabras a los magistrados, los cuales tuvieron
miedo al oír que eran romanos. Y viniendo, les rogaron; y 39
sacándolos, les pidieron que salieran de la ciudad. Entonces, 40
saliendo de la cárcel, entraron en casa de Lidia, y habiendo
visto a los hermanos, los consolaron, y se fueron.
Pasando por Anfípolis y Apolonia, llegaron a Tesalónica, 17
donde había una sinagoga de los judíos. Y Pablo, como acos- 2
tumbraba, fue a ellos, y por tres días de reposo discutió con
ellos, declarando y exponiendo por medio de las Escrituras, 3
que era necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los
muertos; y que Jesús, a quien yo os anuncio, decía él, es el Cris-
to. Y algunos de ellos creyeron, y se juntaron con Pablo y con 4
Silas; y de los griegos piadosos gran número, y mujeres nobles
no pocas. Entonces los judíos que no creían, teniendo celos, 5
tomaron consigo a algunos ociosos, hombres malos, y juntando
una turba, alborotaron la ciudad; y asaltando la casa de Jasón,
procuraban sacarlos al pueblo. Pero no hallándolos, trajeron 6
a Jasón y a algunos hermanos ante las autoridades de la ciu-
dad, gritando: Estos que trastornan el mundo entero también
han venido acá; a los cuales Jasón ha recibido; y todos éstos 7