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Miércoles 22 Agosto 2018

BLANCO - MEMORIA OBLIGATORIA - M
Semana 20º durante el año

contigo en la unidad del Espíritu Santo,
Santa María, y es Dios, por los siglos de los siglos.
Reina
LITURGIA DE LA PALABRA
Se llama Reina a la Virgen
María, nació Reina, así lo 1
1º LECTURAº LECTURA
quiso el cielo desde el Lectura del libro del profeta Isaías
prin ci pio del mundo. En el 9, 1-3. 5-6
capí tu lo 12 del Apocalipsis san Juan la
vio “reves ti da de sol, con la luna bajo El pueblo que caminaba en las tinie-
sus pies, y una coro na de doce estre llas blas ha visto una gran luz; sobre los que
en su cabe za”. La belle za y pure za de habitaban en el país de la oscuridad ha
su alma, la hicie ron Madre de un Hijo brillado una luz. Tú has multiplicado la
Rey, la pro cla ma ron Reina del Cielo y de alegría, has acrecentado el gozo; ellos se
la Tierra. El céle bre doc tor maria no san regocijan en tu presencia como se goza
Alfonso María de Ligorio al hablar so- en la cosecha, como cuando reina la ale-
bre María Reina, se ins pi ró en esta frase gría por el reparto del botín. Porque el
“Reina por su Hijo, con su Hijo y como yugo que pesaba sobre él, la barra sobre
su Hijo”. “Es Reina y Madre de mise ri- su espalda y el palo de su carcelero, todo
cor dia”, “De los már ti res”, “de los con- eso lo has destrozado como en el día de
fe so res”, “de Todos los Santos”. Bendita Madián. Porque un niño nos ha nacido,
por siem pre “Madre de todos”.
un hijo nos ha sido dado. La soberanía
reposa sobre sus hombros y se le da por
nombre: «Consejero maravilloso, Dios
“Concebirás y darás fuerte, Padre para siempre, Príncipe de
a luz un hijo” la paz.» Su soberanía será grande, y ha-
brá una paz sin fi n para el trono de David
y para su reino; él lo establecerá y lo
RI TO DE EN TRA DA sostendrá por el derecho y la justicia,
desde ahora y para siempre. El celo del
Señor de los ejércitos hará todo esto.
Antífona de entrada
Cf. Sal 44, 10 Palabra de Dios.
La Reina está de pie, a tu derecha,
con un vestido precioso, rodeada de
esplendor. COMENTARIO
El nacimiento de este niño es un
Oración colecta obsequio de Dios. Él es un Niño,
Padre, que nos diste como Madre pero es también un Hijo. Desde los
y Reina nuestra a la Madre de tu Hijo, primeros tiempos, el Mesías fue re-
concédenos en tu bondad que, soste- conocido como hijo de David, here-
nidos por su intercesión poderosa, al- dero al trono e Hijo de Dios. ¡El Dios
cancemos la gloria de hijos tuyos en el encarnado! Esa es la única mane-
66 reino de los cielos. Por nuestro Señor ra que se podría alcanzar. Cómo
Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina