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Los Diezmos
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Pastores y líderes, en los últimos años he viajado a muchas partes del mundo y he predicado en muchas iglesias. He notado que en la mayor parte, no se enseña sobre los diezmos y las ofrendas. Si nosotros, como predicadores y líderes no instruimos a la gente acerca de los diezmos y las ofrendas, entonces estamos engañando a las personas.
2 Timoteo 4:2(AMP) predicamos la palabra [como un mensajero oficial]; estar listo para cuando sea el momento adecuado, e incluso cuando no lo es [a mantener su sentido de urgencia, si la oportunidad parece favorable o desfa- vorable, ya sea conveniente o inconveniente, ya sea bienvenida o inoportuna]; correcta [los que se apartan de la doctrina o conducta], advierten [a los que pecan], invitar y animar [los que están creciendo hacia la madurez espiri- tual], con paciencia inagotable y [fieles] enseñanza.
He visto y escuchado a muchos pastores y líderes maldecir sus ofrendas al decir:
1. No hay mucha gente aquí hoy por lo tanto los diezmos y ofrendas serán menos.
2. Miran el número de sobres recogidos, si los sobres son pocos en número asumen que los diezmos y las ofrendas serán pocas.
3. El señor o la señora tal y tal no están aquí hoy, así que los diezmos y ofrendas serán pocas.
4. Necesitamos más gente profesional en nuestra iglesia para que los diezmos y las ofrendas aumenten.
5. Conozco a estas personas, y ellos no pueden dar, por eso es que nuestros diezmos y ofrendas son menos.
Mientras pensemos como el mundo, obtendremos resultados como el mundo. "Las personas no son su recurso” o es decir "su congregación no es su recurso”. Sólo hay una recurso y su nombre es Jesús.
Cuando yo enseño acerca de los diezmos y las ofrendas los Domingos en la mañana, bajo el poder del Espíritu Santo, los pastores se sorprenden por la cantidad de diezmos y ofrendas que se colectan. ¿Por qué? Es porque nunca he puesto mis ojos en las personas, mis ojos siempre están sobre el único que puede hacer que todo sea posible, Jesús.
Les motivo a enseñar y a predicar acerca de los diezmos y las ofrendas. Ponga sus ojos en Jesús y no en la gente. Usted no tiene idea sobre cómo Jesús esté lidiando con su congregación. Él es el único que puede dar ideas de millones de dólares. Él es quien se ocupa de tratar con el corazón de las personas acerca del dar, él es el único que les puede dar favor. Usted no tiene idea de cómo va a venir, pero va a venir. Si su iglesia está construida sobre la ROCA, sucederá.
Los diezmos y las ofrendas son transacciones celestiales, cuando la gente diezma y ofrenda es una transacción celestial. Ellos están dando a Jesús, no a la iglesia. Hebreos Capítulo 7:1-8 (versículo 8) habla de esto, Abraham le dio a Melquisedec y Melquisedec es (Jesús).
Hebreos 7:8(RVR1960) Y aquí ciertamente reciben los diezmos hombres mortales; pero allí, uno de quien se da testi- monio de que vive.
Los animo a enseñar acerca de los diezmos y las ofrendas bajo el poder del Espíritu Santo. Dios sabe dónde usted vive, Dios sabe cuáles son sus circunstancias y Dios está por encima de todo eso. Los diezmos y las ofrendas no se tratan de mantener la iglesia en movimiento, eso es lo que ya usted está haciendo ahora. Sí, utilizamos los diezmos y las ofrendas para eso, pero eso es sólo una pequeña parte, en realidad se trata de impactar el Reino.
Deuteronomio 15:6(RVR1960) Ya que Jehová tu Dios te habrá bendecido, como te ha dicho, prestarás entonces a muchas naciones, mas tú no tomarás prestado; tendrás dominio sobre muchas naciones, pero sobre ti no tendrán dominio.
Génesis 4(RVR1960)Conoció Adán a su mujer Eva, la cual concibió y dio a luz a Caín, y dijo: Por voluntad de Jehová he adquirido[a] varón. 2 Después dio a luz a su hermano Abel. Y Abel fue pastor de ovejas, y Caín fue labrador de la tierra. 3 Y aconteció andando el tiempo, que Caín trajo del fruto de la tierra una ofrenda a Jehová. 4 Y Abel trajo tam- bién de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a Abel y a su ofrenda; 5 pero no miró con agrado a Caín y a la ofrenda suya. Y se ensañó Caín en gran manera, y decayó su semblante. 6 Entonces Jehová dijo a Caín: ¿Por qué te has ensañado, y por qué ha decaído tu semblante? 7 Si bien hicieres, ¿no serás enaltecido? y si no hicieres bien, el pecado está a la puerta; con todo esto, a ti será su deseo, y tú te enseñorearás de él.