Page 88 - Marketing Farmaceútico | Gregorio Zidar

| Índice de difusión tecnológica
Una vez que caducó la patente, ¿cuán difícil es imitar a la molécula innovadora? La respuesta estriba en dos factores: (a) el grado de complejidad del desarrollo y (b) el índice de difusión tecnológica.
La complejidad se debe al principio activo y a la forma farmacéutica. Tomando dos ejemplos bien extremos, copiar al etoricoxib en comprimidos es relativa- mente sencillo, mientras que un anticuerpo monoclonal que se presenta en jerin- gas prellenadas (ej. etanercept), puede resultar una tarea titánica.
El índice de difusión tecnológica consiste en la información a la que puede ac- ceder el laboratorio seguidor. Algunos mecanismos de difusión son: observación directa del competidor sobre sus productos (en Argentina no siempre es fácil importar un producto que está solo en Europa) y pérdidas de personal a favor de imitadores (cuando el cerebro científico que investigó el principio activo deja la compañía y se suma al seguidor).
| Es hora de echar por tierra un mito
Muchos creen, incluso dentro de la comunidad médica, que los productos origi- nales de los laboratorios multinacionales son superiores en calidad. Es hora de echar por tierra este mito. Las empresas locales se caracterizan por elabo- rar productos de excelentes cualidades, avalados por un organismo de pres- tigio como la ANMAT. Incluso en ciertos medicamentos complejos y “sensibles” (como antiepilépticos o antipsicóticos) se exige bioequivalencia, la máxima garantía que avala la seguridad y eficacia de los mismos.
Algo similar ocurre entre las propias compañías locales. Retomando el caso de Roemmers y Richet, el losartán que comercializan es idéntico. Muchas veces las etiquetas a las que hacíamos referencia prestan a la confusión. Incluso este mito de que la calidad de Richet es inferior se propaga dentro de la propia fuer- za de ventas. Y en algunos casos, los pacientes dudan por el “factor precio”: desconfían de un medicamento que es más barato que otro y lo asocian a una mala calidad. Pero esto no es más que un fábula.
Denver Farma debe ser uno de los casos que mejor ilustran estos mitos. Ro- tulado como “generista”, basta con recorrer su moderna planta en el parque
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