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Saliendo del
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Desánimo

Cuando leemos las palabras de David en el Sal- Simplemente, el espíritu del desanimo es una David expresó el llanto universal de las almas En su momento de desánimo, David no pu-
mo 38, encontramos a este hombre santo y arma potente de Satanás contra los elegidos de justas, que soportan la prueba del desánimo: do entender por qué él estaba tan desani-
justo al fi nal de sí mismo. Él estaba abatido y Dios. A menudo, él lo usa para tratar de con- “Estoy por desfallecer; el dolor no me deja un mado. Él preguntó, “¿Por qué te abates, oh
desalentado, y su lucha lo había debilitado de vencernos que la ira de Dios vino por nosotros solo instante.” (Salmo 38:17). La palabra “des- alma mía, y te turbas dentro de mí?…” (Sal-
toda fuerza. mismos, al no dar la medida a sus estándares fallecer” en hebreo signifi ca “caer.” David le mo 42:5). Pero sus preguntas no dudaban
Cuando leemos las palabras de David en el Sal- santos. Pero el apóstol Pablo nos insta a no decía a Dios, “No puedo, Señor. ¡Estoy por com- a Dios. David realmente comienza el salmo
mo 38, encontramos a este hombre santo y caer en las trampas del diablo: “para que Sata- pleto al fi nal-y estoy por caer!” expresando su sed profunda por el Señor:
justo al fi nal de sí mismo. Él estaba abatido y nás no se aproveche de nosotros, pues no igno- Dios será siempre tierno con nosotros en nues- “Como el ciervo [venado] brama por las co-
desalentado, y su lucha lo había debilitado de ramos sus artimañas.” (2 Corintios 2:11). tra condición indefensa - ¡Pero nunca debemos rrientes de las aguas, Así clama por ti, oh
toda fuerza. Escucha su llanto turbado: permitir que la incredulidad penetre nuestro co- Dios, el alma mía. Mi alma tiene sed de Dios,
Pablo dice, “¡Tienen que ver su desanimo por razón! del Dios vivo: ¿Cuándo vendré, y me presen-
“Estoy agobiado, del todo abatido; todo el día lo que realmente es! Es un arma del demonio taré delante de Dios?” (Salmo 42:1-2).
ando acongojado. Me siento débil, completa- — una fl echa que Satanás les dispara de su Le podemos expresar a Dios todo lo que quera-
mente deshecho; mi corazón gime angustia- aljaba para hacerles dudar de sí mismos. Él mos, sobre nuestros sentimientos de fracaso. En medio de su desánimo, David clamó por
do… Late mi corazón con violencia, las fuerzas sabe que no puede tentarnos para alejarnos Podemos contarle acerca de nuestra deses- una revelación del Señor. Él decía, “Dios, nun-
me abandonan, hasta la luz de mis ojos se apa- de Jesús. Así que él lo inunda con mentiras peración por nuestros pecados y errores in- ca antes había tenido más amor por ti.
ga… Pero yo me hago el sordo, y no los escu- viciosas, para hacerle pensar que nunca se- sensatos. Pero nunca debemos entretener 2. ¡Vaya a la oración, dándole tiempo al Espí-
cho; me hago el mudo, y no les respondo. Soy rá lo sufi ciente bueno para servir a Cristo. pensamientos que él nos ha abandonado. Esta ritu Santo para hacer su obra!
como los que no oyen ni pueden defenderse.” ¡Él quiere abatirlo tanto que querrá tirar la es una acusación grave, y nuestro Señor no lo
(Salmo 38:6, 8, 10, 13-14). toalla!” toma levemente. Vemos su reacción inmediata Cuándo estás bajo el ataque del espíritu de
Pregúntate si el clamor del corazón de Da- a esta clase de acusación en Números: desánimo del enemigo, no sentirás deseos de
Cuando leí este salmo, me imagino que David vid; es tu propio clamor, cuando eres agobia- orar. Pero debes ir al lugar secreto y estar en
se desplomó en la desesperación. Quizás lo que do por el espíritu del desánimo. “(Israel) viajó del monte Hor por el camino del la presencia de Jesús. No es necesario tratar
le molestó más, fue el no poder entender por Mar Rojo… En el camino, se impacientaron y de orar tu salida de la desesperación. Este es
qué repentinamente había caído tan bajo. Este Debilidad, dolor, quebrantamiento, proble- comenzaron a hablar contra Dios y contra Moi- el momento para que el Espíritu de Dios obre
hombre tenía hambre por el Señor, derramando mas, inquietud, luto; todas estas cosas sés: ¿Para qué nos trajeron de Egipto a mo- en tí. Es su trabajo sacarte del abismo.
su corazón a diario en oración. Él reverenció la inclinaban el espíritu de David. Él sentía rir en este desierto? ¡Aquí no hay pan ni agua!
palabra de Dios, escribiendo los salmos que en- desánimo y un vacío, sin dirección, como ¡Ya estamos hartos de esta pésima comida! Por Cuándo vayas al Señor, se honesto con él. Dí-
salzaban su gloria. Pero ahora, en su estado de- si él no aprendió nada a través de los años. eso el Señor mandó contra ellos serpientes ve- le lo débil e impotente que te sientes. Déjale
presivo, lo único que podía hacer era llorar, “Señor, “…hasta la luz de mis ojos se apaga.” (Sal- nenosas, para que los mordieran, y muchos is- saber, “Jesús, estoy seco. Ya no tengo más
estoy al fi nal de mi lazo. ¡Y no tengo la menor idea mo 38:10). David decía, “He perdido mi en- raelitas murieron.” (Números 21:4-6). fuerzas. Si voy a salir de esta depresión, tu
por qué acontece!” tendimiento espiritual. Mi visión y revelación tendrás que hacerlo.”
del Señor me han dejado. ¡No puedo llegar a ¡Cuándo la Biblia me dice que mi amoroso Pa-
Como muchos cristianos desalentados hoy, David Dios como antes!” dre celestial, mando serpientes venenosas a su Lo primero que el Espíritu hace cuando Él vie-
trató de averiguar por qué se sentía tan vacío y propia gente, y que ellos murieron de sus mor- ne es ¡Exponer todas las mentiras de Sata-
quebrantado en espíritu. Él tal vez revivió cada fra- Esta es la obra del espíritu del desánimo de deduras, no puedo ignorar el mensaje muy cla- nás!
caso, pecado y acto insensato en su vida. En algún Satanás. ¡Nos hace un blanco para los pode- ro: ¡Dios no permitirá tal incredulidad entre sus
punto él pensó, “Oh, Señor, ¿será que todos mis res del infi erno momentos después de nues- elegidos! Después de todo lo que nuestro amo- “Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien
actos descuidados me han dejado tan herido, que tra victoria espiritual más grande! roso Señor ha hecho por nosotros, la acusación el Padre enviará en mi nombre, les enseñará
estoy más allá de la esperanza?” más dañina que podemos hacer contra él, es todas las cosas y les hará recordar todo lo
Este pesado espíritu demoníaco derribó a Da- decir que él nos ha abandonado. Debemos te- que les he dicho” (Juan 14:26).
Finalmente, David razonó que Dios lo estaba vid tan bajo, que estaba mudo ante la presen- ner cuidado con tal incredulidad, especialmente
disciplinando. Él clamó, “Señor, no me repren- cia de Dios. Él dijo, “Mas yo, como si fuera en nuestros momentos difíciles. Escucha estas palabras maravillosas de
das en tu enojo ni me castigues en tu ira. Por- sordo no oigo; y soy como un mudo, que no Isaías:
que tus fl echas me han atravesado, y sobre mí abre su boca. Soy pues, como un hombre que David es nuestro ejemplo de alguien que man-
ha caído tu mano. Por causa de tu indignación no oye, Y en cuya boca no tiene represiones.” tuvo su fe. Aún en su punto más bajo, David no “¿No has sabido? ¿No has oído, que el Dios
no hay nada sano en mi cuerpo; por causa de (Salmo 38:13-14). se permitió revolcarse en la incredulidad. Pro- eterno es Jehová, el cual creó los confi nes
mi pecado mis huesos no hallan descanso. Mis clamó, “Yo, Señor, espero en ti; tú, Señor y Dios de la tierra? No desfallece, ni se fatiga con
maldades me abruman, son una carga demasia- En hebreos la última frase signifi ca “un hom- mío, serás quien responda.” (Salmo 38:15). cansancio y su entendimiento no hay quien lo
do pesada.” (Salmo 38:1-4). bre que ya no tiene más respuestas ni argu- alcance. Él da esfuerzo al cansado, y multipli-
mentos.” David decía, “Señor, estoy tan bajo Si estas soportando un ataque de un espíritu ca las fuerzas al que no tiene ningunas. Los
Permíteme señalar que David no solo escribió y desalentado que no puedo levantar mis ma- demoníaco del desánimo, te sugiero que haga muchachos se fatigan y se cansan, los jóve-
acerca de su propia condición en este salmo. Él nos hacia ti. No puedo orar, porque estoy muy estas tres cosas: nes fl aquean y caen; pero los que esperan a
describe algo que todos los amantes fi eles de confundido para hablar. Estoy sin ánimo y va- Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán
Jesús en algún punto en su vida han confronta- cío. No tengo nada que decir.” 1.No trates de maniobrar tu salida del mismo. alas como las águilas; correrán, y no se can-
do. ¡El habla de estar bajo un ataque demoníaco, sarán; caminarán, y no se fatigarán.” (Isaías
bajo una plaga espiritual del desanimo! El gran predicador inglés C.H. Surgen dirigió No intentes escapar el ataque por tus propios 40:28-31).
multitudes a Cristo por sus sermones pode- esfuerzos. Tu no estas a la altura del espíritu
Esta clase de espíritu desalentador, viene direc- rosos. Pero él sufría ataques de melancolía. demoníaco que está contra ti. La batalla está
tamente del vientre del infi erno. Y el tiempo A menudo sentía como si nunca lograba na- más allá de tu habilidad humana o el poder fí-
viene cuando cada creyente fi el, es agobiado da en su vida. Él lamentó una vez, “tengo el sico para combatir. Ni lo puedes solucionar ha- __________
por esta experiencia repentina e inesperada. corazón más negro en Bretaña.” Frecuente- blando con amigos, o intentar vencerlos con
Ningún cristiano lo atrae a sí mismo, ni el mente en su jardín, levantaba sus manos a libros, seminarios o consejeros. El confl icto es- David
Señor lo manda. Tal ataque generalmente Dios y clamaba, “Señor, nunca te he deseado tá en el reino espiritual, y se tiene que pelear
no tiene nada que ver con ningún pecado o más, mas mi espíritu nunca ha estado tan ba- en el espíritu. Wilkerson
falla específica por el creyente. jo. ¿Por qué me pasa esto?” Pastor