¡Hemos llegado!
¡Despacio! ¡Arriba
ahora! Así es.
Súbete a su lado. Ahí
hay una manta, no
muy limpia,
pero tápalo con ella, y
piensa en una
plegaria. Yo
conduciré.
Pudda ¡Que el cielo nos
depare un buen
viaje, y que
lleguemos!
¿Adónde lo llevamos?
¡Cómo crujen estas
ruedas!