Page 27 - Boletín Mensual de Información - Diciembre

Es cierto que hoy en día existe más conocimiento e idea de lo que implica buscar ayuda psicológica, pero muchas veces llegan a consulta personas que no saben qué esperar o no conocen lo que en realidad implica un proceso terapéutico. Es por lo anterior que hoy quiero compartir contigo a grandes rasgos en qué consiste la psicoterapia.
Dentro de un proceso terapéutico se atienden a 3 grandes etapas:
• Evaluación diagnóstica y acuerdos terapéuticos.
• Trabajo terapéutico.
• Conclusión y cierre.
Te cuento un poco más a detalle de cada una:
En la primer etapa se busca indagar acerca del objetivo o motivo de consulta, cuáles son los síntomas que pueden estarse presentando y que preocupan al paciente, desde cuándo aparecieron, se busca indagar un poco acerca de la historia de vida, antecedentes de salud mental, y cómo es el estado actual de salud de la persona. Cabe mencionar que ésta primera etapa puede llevarse varias sesiones.
Una vez que se tiene suficiente información, se puede generar un diagnóstico o hipótesis diagnóstica que permitirá generar un trabajo terapéutico. Me gustaría aclarar que el diagnóstico no será necesariamente alguno que implique el padecimiento de algún trastorno mental, podrá también ser la claridad de la etapa de vida que se está atravesando, o alguna situación que “de sentido” al malestar o situación que se está viviendo, por ejemplo: síntomas de ansiedad, crisis, duelo, búsqueda de sentido de vida, trastornos de conducta alimentaria, estrés postraumático, depresión, etc.. Tener un diagnóstico también nos permite determinar si es necesario buscar la valoración de algún otro profesional para atender la problemática de forma interdisciplinaria.
Usualmente se atienden problemáticas que requieren atención psiquiátrica y en paralelo un proceso terapéutico, no obstante, en algunas ocasiones se identifica la necesidad de acudir con algún otro especialista para atender o descartar padecimientos asociados a las problemáticas referidas.
En esta primera etapa se establecen también acuerdos entre la persona consultante y el psicoterapeuta, y a esto le llamamos encuadre. El encuadre usualmente se establece en el primer encuentro con el paciente; y éste es el conjunto de acuerdos entre terapeuta y paciente. El encuadre tiene como finalidad que el proceso fluya de manera clara y armónica.
¿Qué abarca el encuadre? Se llega a un común acuerdo en el día y hora de la sesión, por qué medio habrá comunicación para cualquier eventualidad de la terapia, pago de honorarios, etc.. Adicionalmente se le comunica al paciente qué implica la confidencialidad en el proceso terapéutico y cuáles son los límites de dicha confidencialidad.
Posterior a esta etapa se van estableciendo ciertos objetivos que pueden variar desde la mejora de ciertas situaciones o problemas hasta la priorización de los distintos temas que se quieren trabajar. Cabe destacar que durante el avance de las sesiones éstos pueden replantearse de acuerdo a la necesidad de cada proceso terapéutico.
En la segunda etapa se empieza a trabajar en el cumplimiento de los objetivos.
La segunda parte del proceso suele ser la más larga, y será a través del desarrollo de las sesiones que se trabaje en la búsqueda del cumplimiento de uno o varios de los objetivos planteados.
¿Qué pasa dentro de las sesiones? La comunicación verbal será una de las principales formas en la que se empiezan a abordar las problemáticas planteadas en un inicio, y es a través del tiempo y de la puesta en práctica de lo hablado en sesión que podrán verse cambios o perspectivas distintas.
Es fundamental tener claro que ningún proceso es lineal, y que puede ser que de pronto, aunque se haya establecido una priorización de un tema sea fundamental hablar de otro; incluso suele ocurrir que se llegan a presentar situaciones que no se tenían previstas pero que requieran una atención inmediata dentro del proceso y todo ello es parte del proceso terapéutico personal.
¿Psicoterapia? Boletín Mensual 27 de Información