Page 185 - WORLD WC Antes de la Tormenta
P. 185

—Ahora pues. ¿Hay alguna pregunta?


                    Parqual se calmó y levantó su mano. La brillante mirada roja cayó sobre él.


                    —Habla —dijo Sylvanas.


                    —¿Se nos permitirá intercambiar cosas?


                    —Se permitirá intercambiar baratijas de la siguiente manera —dijo Sylvanas—.
           Antes del evento, cualquiera cosa que deseen darle a sus contrapartes serán examinadas.
           Habrá áreas en el campo en dónde deberán colocarse en mesas cuando lleguen al lugar de
           reunión. La  Alianza hará lo  mismo. No  toquen  nada que  hayan  dejado  en las  mesas

           mientras estén en el campo. Al final del día se recolectarán esos objetos y se revisarán
           para asegurarnos de que son seguros y no contienen nada sedicioso. Serán distribuidos a
           ustedes más tarde ese día. La Alianza hará lo mismo con sus regalos, espero.


                    —Nuestra Dama Oscura es muy generosa —dijo Parqual.


                    Sylvanas inclinó la cabeza


                    —Me imagino que tienes un objeto que te gustaría compartir.


                    —Sí —pensó con cariño en un juguete que Philia alguna vez quiso. Lo había
           dejado atrás cuando…


                    —Entonces espero sinceramente que la Alianza no decida tirarlo —dijo Sylvanas
           en una voz suave, ronroneante. Era un pensamiento cruel y Parqual no quería entretenerlo.


                    —¿Alguna otra pregunta?


                    Otra mano se alzó.

                    —¿Podremos tocarlos? ¿A nuestros seres queridos?


                    —Podrán —respondió Sylvanas—. Aunque no puedo garantizarles que ese toque

           sea bienvenido.

                    De  nuevo  un  pensamiento  desagradable.  La  duda  se  removió  en  la  mente  de

           Parqual pero la forzó a quedarse atrás. No su Philia. Él había esperado que escuchar acerca
           de su líder lo haría sentir mejor, en cambio, se sentía inestable e infeliz. Otros también
           parecían sentirse de ese modo. Y entonces entendió.


                    Sylvanas no quería que lo hiciera, pero no podía salir y simplemente prohibirlo.

           Había demasiados de ellos. Sus ideas comenzaban a propagarse. Incluso gente como
           Elsie, que eran completamente leales a la Dama Oscura, que la amaban… incluso Elsie




                                                           184
   180   181   182   183   184   185   186   187   188   189   190