Page 24 - I. Origen de los indios de Amrica. II.Origen y civilization de los indgenas del Peru
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            todo en ningúa período de tu cvolnción, concordancia que
            no puede esperarse, porque de verificarse, serían iguales las
            facultades mentales del Hombre y del mono.  **Los monos-
            añade Darwin—están sujetos á muchas de nuestras enferme-
            dades no contagiosas: padecen catarros, con sus ordinarios
            síntomas, terminando, cuando con demasiada frecuencia se
            repiten, con la tisis; sufren también apoplegías, itiflamacio-
            nes y cataratas. Los remedios producen en ellos los m'<;mos
            efectos que en el Hombre    Muchas especies de monos tie-
            nen muy pronunciado gusto por el té, el café y las bebidas
            espirituosas; fuman también el tabaco con placer/' Aunque
            estos hechos son de poca importancia, prueban, empero,
            cuan semejantes son los nervios del gusto en el Hombre y los
            monos,  y  que, en ambos, puede ser afectado del mismo mo-
            do el sistema nervioso.
               El naturalista Arturo Mangin, en su obra VHomme et
            V Animal,] establece una diferencia entre el Hombre y el mo-
            no, diciendo: ''Zoológicamente hablando, el Hombre se dis-
            tingue de los graades monos por caracteres anatómicos   y
            físiológicop, y se diferencia psicológicamente de todos los
            demás animales por facultades mentales, de las que varias
            le son exclusivamente propias, al paso que otras están sólo
            más desarrolladas en él que en el animal."
               Ea las remotas primitivas Edades, en que se operóla
            evolución progresiva, por la cual el mono antropóide se
            perfeccipnó gradualmente hasta llegar el Hombre al estado
            de su completo desarrollo, hay que tener en cuenta que la
            Naturalesa evolucionaba vertiginosamente:   la fauna y la
            flora sufrieron sucesivas transtormaciones, hasta perderse
            esas especies extraordinarias desconocidns hoy, á la vee que
            las grandes perturbaciones cliiiatéricas, en la sucesión de
            los siglos, determinando el Período Cuaternario, en^ue apa-
            reció el Homo sapiens, que es el ser más perfecto de la Crea*
            don.
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