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Especial: Marco Martos Carrera


                                                                  niña rápida muestra en lo alto / el perfecto talón
                        El conversacionalismo no fue              mientras el entusiasmo / brilla en los ojos del
                        solamente el mejor antídoto               lector de Keats»). Ahora estamos ante un poe-
                                                                  ma altamente conmovedor en que se nos habla
                           contra la elocuencia, la               de una separación que ya se ha consumado. Sin
                       declamación y la solemnidad;               embargo, en este amor ya no correspondido, el
                         supuso también la creación               poeta no suplica a la amada que regrese, ni está
                                                                  presente el clásico lamento por el bien perdido,
                        de un sujeto novedoso cuyas               sino que el poeta contempla y describe, resigna-
                          características son ahora               do, la nueva condición que asume y se asume
                                                                  tras el quiebre amatorio. De forma  opuesta a
                         fácilmente reconocibles [...]            «Varona y varón», esa unión de a dos ya no es
                                                                  más la protección y salvación contra los males
                                                                  del mundo. Los amantes ya no lo son más, y el
                     la del tiempo que pasa (tan cara en la poesía es-  hablante lírico va describiendo lo que va quedan-
                     pañola del Siglo de Oro) y que, claro está, se en-  do de ese universo que ambos construyeron: los
                     tronca con el tópico del carpe diem, que también   escombros a través de las cosas embaladas, los
                     está presente en otros poemas como «Natural   objetos que un día fueron de ambos y sobre los
                     mind»: «Tu camino será como un río / Insen-  que quedó el hálito de ese antiguo amor: «Em-
                     sato y no previsto en el códice». Está también la   pacados quedan los muebles que de tan / lejos
                     otra poderosa imagen, la del mar, que es donde   trajiste», nos dice en su primer verso, mostrán-
                     van a parar los ríos. Están allí los versos de Jor-  donos esa condición de desamparo a través de
                     ge Manrique: «Nuestras vidas son los ríos / que   esas cosas que ahora están cubiertas, listas para
                     dan a la mar / que es el morir», cuando Martos   desaparecer de su vida. La idea de pertenencia
                     nos dice en este poema: «El mar que ahora es   mutua también se diluye: lo que era de ambos,
                     verde con escamas / Cuando se canse será azul   ahora se separa: «es tuya la casa que mi padre
                     color índigo». Luego, esa muchacha prefigurada   soñó para nosotros», es decir, lo que fue un sue-
                     en el poema se volverá a asociar a dicha figura   ño no solo de ellos, y que le va siendo despojado
                     del río: «Tu camino será como un río / Insensato   de a pocos al hablante lírico. Ella se va, y con
                     y no previsto en el códice». Y esta imagen del   ella, todo; él se va quedando vacío, incluso sin
                     tiempo que pasa, reflejado en los ríos que fluyen   los niños con que un día formaron una familia:
                     a un mar que cambiará de color es claramente la   «y mientras corres por la playa te vas quedando
                     proyección de ese concepto de la vida que fluye   para siempre  / con mis niños. En la mañana, en
                     y que acaba: «Por eso elijo el mar verde con esca-  la tarde   a veces,  / en la noche, deslizas tus ojos
                     mas / sabiendo que será azul color índigo / Con   febriles por los   libros  / que antes no quisiste».
                     su tiempo guardado en tu memoria / Dibujado   Ahora el bien amado solo llega a él a través de
                     en un pasado que no existe». Es el aquí y el aho-  otras voces, otras historias y rumores: «De rato
                     ra, el pasado ya no se palpa ni se «goza como un   en rato voces hay / y me cuentan de tus sonrisas
                     bocado», hay que vivir el instante.          por las calles de   Lima. / Mas todo ha ido cam-
                        Así, de entre las vivencias del poeta, esta co-  biando: en la casa no vive  nadie».      37
                     rrelación con la imagen del tiempo y su fuga-   Y esta repentina soledad descrita, pronto se
                     cidad, se expresa también  en sus poemas que   transformará, para el poeta, en un doloroso ol-
                     narran acercamientos amorosos con muchachas   vido,  en una dilución de  su propia existencia:
                     que tal vez no le correspondan o  jueguen con   «los niños van creciendo y con ellos el olvido:
                     él a corresponderle (como sucede en el notable   / pronto seré solo un nombre una revista / que
                     poema «Juego de manos»). Las alusiones direc-  llega el séptimo día».
                     tas a los lugares en que transita son otras carac-
                     terísticas notables en el libro, pero el único poe-
                     ma de este trabajo que de manera conmovedora,     Así, de entre las vivencias
                     poderosa y notable expresa el tema del desamor
                     es «Hifalto».                                 del poeta, esta correlación con la
                     El tópico del desamor                        imagen del tiempo y su fugacidad,
                        «Hifalto» es el quinto poema de Carpe Diem.   se expresa también en sus poemas
                     Atrás quedaron, dentro del universo de ficción    que narran acercamientos
                     poética de este libro, los poemas que ensalzan   amorosos con muchachas que tal
                     al amor y a la mujer (por ejemplo en «Dague-     vez no le correspondan  [...]
                     rrotipo»: «Y en la duermevela de ese verano / la
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