Page 36 - LIBRO DE RELIGION 2° MEDIO
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Desde la perspectiva cristiana
La Confirmación, sacramento de la madurez
Por el sacramento del Bautismo, el cristiano y la cristiana nacen a la vida de la fe y
se integran en la Iglesia. Sin embargo, esta fe es como una semilla que se planta en
la tierra: debe crecer y madurar. En el caso del Bautismo de niños y niñas pequeños,
son los padres y padrinos quienes lo deciden y se comprometen por ellos.
Para que la semilla de la fe crezca y se robustezca, es necesario regarla y abonarla
con el ejemplo y las enseñanzas de la familia, con el testimonio y la catequesis
de la comunidad cristiana, y con el alimento de la Palabra de Dios y el pan de
la Eucaristía.
De esta manera llega un momento en que el bautizado o bautizada toma plena
conciencia de querer seguir el estilo de vida de Jesús y se alegra de ser hijo de
Dios y miembro de la Iglesia.
Entonces, es el momento de celebrar el sacramento de la Confirmación.
Así, el joven cristiano o cristiana hace suya y confirma la decisión que sus padres
tomaron el día de su Bautismo.
Por eso, según la práctica más habitual, este sacramento marca el final de la
iniciación cristiana. Gracias a él, el bautizado o bautizada se vincula más estre-
chamente a la Iglesia y se compromete a ser testigo de la Buena Noticia de
Jesús con sus acciones y sus palabras en todos los ámbitos de su vida: familia,
estudios, trabajo, amigos, tiempo libre, vida política y social...
Por todo ello, se dice que la Confirmación es el sacramento que marca la ma-
durez cristiana.
Esta madurez cristiana no consiste en un proceso espontáneo. Es necesario un
camino de crecimiento y de inserción cada vez más permanente en la comunidad
cristiana que se puede mirar desde tres perspectivas distintas pero complemen-
tarias:
• Ámbito de los conocimientos y fundamentos de la fe: se refiere a las ideas y convicciones que tenemos respecto a
Dios, a la Iglesia y a todos los conceptos relacionados con la identidad cristiana. Este ámbito responde a la pregunta
¿QUÉ ES LO QUE SÉ Y PIENSO DE MI FE?
• Ámbito de lo afectivo y lo motivacional: se refiere a la disposición afectiva que tiene el creyente frente a todo lo
relacionado con su fe. Este ámbito responde a la pregunta: ¿QUÉ ES LO QUE SIENTO DE MI FE? ¿QUÉ ME MOTIVA A
EXPRESAR MI FE?
• Dimensión operativa o comportamental de la actitud de fe: se refiere a la necesaria coherencia entre lo que se dice
y se hace, entre lo que se cree y lo que se ora. Este ámbito responde a la pregunta: ¿QUÉ ES LO QUE REALIZO PARA
SER COHERENTE CON MI FE?
En cada una de ellas se dan rasgos maduros de la actitud cristiana. Es necesario desarrollarlos para crecer armó-
nicamente y en coherencia con el sacramento de la Confirmación.
Actividad 7
Vuelve a leer los tres aspectos de la madurez cristiana y completa la tabla siguiente en tu cuaderno:
Aspecto de la fe Expresiones que expresan dicho aspecto de fe
Lo que conozco y he aprendido Escribe tres ideas que has aprendido sobre tu fe:
sobre mi fe cristiana.
Lo que siento y quiero de mi fe Relata alguna emoción que hayas sentido relacionada con tu vida de fe:
cristiana.
Lo que realizo motivado por mi fe Relata algún compromiso concreto que hayas realizado motivado por la fe:
cristiana.
36 RELIGIÓN 2º MEDIO • UNIDAD 2