Page 32 - Manual BAE
P. 32

El modelo competencial de inserción laboral para discapacitados se basa en
                  los recursos con los que cuenta un individuo para asumir progresivamente

                  nuevos  roles,  para  adquirir  habilidades  y  capacidades…  es  decir  en  los
                  recursos  individuales  para  adaptarse  mejor  a  los  cambios. Actualmente  el

                  modelo de competencias también se utiliza para la valoración de puestos de
                  trabajos y la selección de personal.


                  El  modelo  de  competencias  para  la  inserción  de  las  personas  con

                  discapacidad  surge  como  respuesta  a  aquellos  modelos  basados  en  los
                  déficit  y  discapacidades.  A  raíz  de  este  modelo  se  destacan  las

                  competencias y habilidades personales, incidiendo los procesos de inserción
                  en el desarrollo competencial y en las potencialidades de la persona.


                  Desde  este  modelo  se  analizan  las  competencias  puestas  en  juego  en  el

                  ámbito laboral con el fin de acotar los aspectos centrales de la intervención.
                  De  modo  general,  las  competencias  laborales,  aunque  se  trata  de  un

                  concepto amplio ya que integran una combinación de recursos personales

                  como  conocimientos,  habilidades,  destrezas,  comportamientos,  actitudes,
                  etc.…  son  comportamientos  que  están  orientados  a  la  acción  y  que  son
                  observables a través de los resultados de la propia acción.


                  Son estas características de comportamientos observables y tendentes a la

                  acción las que facilitan el abordaje metodológico a través de la identificación

                  y recuperación de las propias competencias personales adquiridas durante
                  la  trayectoria  vital,  así  como  su  transferencia  a  la  acción  en  diferentes
                  contextos,  especialmente  en  el  desarrollo  de  una  ocupación  determinada.

                  En  este  sentido,  el  modelo  se  basa  en  los  aspectos  positivos  del

                  desempeño, es decir, de lo que una persona es capaz hacer.


                  En los procesos de inserción se tiene en cuenta, por tanto, las capacidades
                  personales  y  las  necesidades  del  mercado  laboral,  lo  que  posibilita  su
                  adecuación  además  de  posibilitar  a  través  de  las  acciones  de

                  acompañamiento  y  entrenamiento  de  aquellas  competencias  clave  para

                  mejorar la empleabilidad.




                                                                                                    32
   27   28   29   30   31   32   33   34   35   36   37