Page 24 - Revista Nuevos Aires de Bolívar (Nº 19)
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Summerhill y el miedo a la libertad Sin duda podríamos encontrar numero-
Detractores y muchos de sus partida- sos detalles con los que no estar de acuer-
rios se unieron en contra de este tipo de do con Neill, como pensar que los niños
escuelas, porque creían que “demasiada necesitan de ciertas reglas o límites, o de
libertad” conduce al libertinaje. Nada más que sí es importante un método de ense-
lejos de Neill, quien proponía más bien ñanza; pero lo que es innegable es el tre-
la autorregulación y el autogobierno, y mendo paso que significa aprender a ser
que mientras más pronto los humanos libres sin hacer daño a los demás y enri-
aprendiéramos a hacerlo, más felices cre- quecer la creatividad y la singularidad.
ceríamos.
Formar seres humanos felices y libres
Una de las principales razones por las probablemente nos aleje de las guerras,
que las escuelas tradicionales se reprodu- la locura y los males sociales.
cen más que las escuelas libres o demo-
cráticas es porque los mismos padres se Summerhill sigue abierta, a pesar de
resisten a dejar los modelos de jerarquía algunos intentos que hubo por sectores
de “padres” e “hijos”, los pedagogos en burocráticos y estructuralistas por cerrar-
general (no todos, afortunadamente) sien- la. Actualmente el gobierno británico lle-
ten que pierden autoridad cuando no se gó al acuerdo de aceptar la no obligatorie-
imponen por la fuerza y porque una edu- dad de las clases e incluso de proteger la
cación “normal y generalizada” siempre escuela.
será más fácil que tomarse el trabajo de
preguntar y averiguar qué es lo que siente Es por eso que, hasta el día de hoy, es la
cada persona. “escuela libre” más antigua del mundo.