Page 280 - NUEVE MUJERES, LIDERAZGOS QUE INSPIRAN
P. 280
Nueve Mujeres: Liderazgos que Inspiran
y, los fines de semana, lo vendía a sus abuelos y tíos. El mismo paño se revendía una y otra vez durante meses y luego le daba la mitad de las “ganancias” a “la” Marta. El negocio funcionó perfecto, porque nadie se resistía ante el espíritu empresarial de esa niña de cinco años.
Más tarde la misma Ashoka también eligió a su hijo Gonzalo como miembro de la entidad, con lo cual se originó una situación única en el mundo, en que madre e hijo pertenecían a esa misma organización, al poseer las mismas condiciones.
Antes del capítulo de Ashoka, el 3 de junio de 1992 ocurrió un hito muy importante, cuando se realizó la famosa Cumbre de la Tierra, en Río de Janeiro, uno de los puntos de inflexión a nivel histórico relativo a los tema ecológicos en el mundo. Este evento finalizó con un documento de gran importancia simbólica, la Declaración de Río, el equivalente a la Declaración Universal de los Derechos Humanos para el medio ambiente, que junto con otro documento, la Agenda 21, definió el debate sobre el medio ambiente durante las décadas siguientes.
Después de la Cumbre de Río surgió en las empresas a nivel mundial el concepto de responsabilidad social corporativa y las grandes organizaciones empezaron a avanzar por la vía de la sustentabilidad. Se experimentó un vuelco inédito en las corporaciones mundiales, una suerte de búsqueda de virtud empresarial que las llevó a realizar importantes cambios en la forma en que se relacionaban con sus comunidades. Algunas lo hicieron por interés, otros por mantener su reputación, por evitar demandas judiciales, y otras por un genuino impulso altruista.
“Comenzaron a llegar a Casa de la Paz, las empresas que no sabían cómo manejar estos temas y encontraron en mí, probablemente, una bisagra entre ambos mundo, entre el ambiental y social, que los amenazaba y alguien que los entendiera. Yo tenía un capital de confianza que me siguió luego de la salida de Porta y la posibilidad de la doble interlocución. Casa de la Paz no buscó relacionarse con las empresas privadas por encontrar nuevas fuentes de financiamiento. No fue así, siempre estuvimos dispuestos a asumir que la aventura de la Casa de la Paz podría concluir si las circunstancias no eran propicias para su existencia. Por ello, el debate al interior del equipo profesional y del directorio se dio en términos de entender que el sector privado es un actor clave en el desarrollo sustentable, por lo que si se trataba de cambiar conductas, las empresas privadas no podían quedar fuera de nuestro ámbito de acción. Para nosotros el desafío era poder definir con qué empresas privadas íbamos a trabajar de modo de nunca traicionar nuestra misión”, expresa Ximena Abogabir.
Es probable que esta decisión de incorporar al sector privado dentro del quehacer de la ONG, de manera tan decidida y exitosa, fuera una de las acciones
280