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Psicología 4° Secundaria

CONDICIONAMIENTO OPERANTE
Fue B. F. Skinner, psicólogo norteamericano contemporáneo, quien descubrió un segundo tipo de
condicionamiento, denominado condicionamiento operante.
Es la ciencia experimental de la conducta, la que se refiere a un proceso en el cual la frecuencia con que está
ocurriendo una conducta se altera o modifica, debido a las consecuencias que esa conducta produce. También
se conceptúa al condicionamiento operante, como la teoría del aprendizaje que intenta explicar la conducta
que es nueva para el organismo, proponiendo que dicha conducta se adquiere, debido a que las consecuencias
que percibe el organismo aprendiz aumentan o disminuyen la frecuencia de aparición de esas conductas.

El experimento de Skinner
El experimento llevado a cabo por Skinner fue el siguiente: colocó a una rata blanca hambrienta (privada de
alimento por 24 horas) en una caja bien aislada en la que se encontraba una palanca que podía ser accionada
por el animal. Si la rata accionaba la palanca, un dispositivo mecánico dejala caer una bolilla de alimento al
comedero instalado dentro de la misma caja cerca de la palanca.
En un comienzo, el comportamiento del animal en la caja de experimentación es más o menos caótico: explora
la caja y corre de aquí para allá, sin tocar la palanca. Al cabo de un tiempo, y por casualidad, acciona la
palanca y el alimento cae en el comedero. La rata ingiere la bolilla y vuelve a accionar la palanca, repitiéndose
lo sucedido anteriormente. El proceso se repite con insistencia y la rata corre sin cesar del comedero a la
palanca.
La característica esencial del condicionamiento operante reside en el refuerzo (alimento) que percibe la
conducta operante (accionar la palanca). La expresión condicionamiento operante refleja el hecho de que el
animal opera, o actúa, de acuerdo con el ambiente natural o el del laboratorio, para producir un efecto. El
efecto producido determinará si el animal ejecuta de nuevo una respuesta, o si continuará comportándose
como antes.

Principios del condicionamiento operante
Son básicamente los siguientes cinco principios:

a. Reforzamiento positivo
Se refiere a cualquier evento cuya presencia aumenta la probabilidad de que se repita el comportamiento
inmediato anterior; es decir, si la aparición de un estímulo como consecuencia de una respuesta, resulta
en una mayor probabilidad de que la respuesta ocurra en el futuro.

Ejemplo:
Estímulo – Conducta – Consecuencia
Reunión de Pepe cuenta La gente se ríe
amigos chistes

En el caso que hemos visto, la consecuencia, (la gente se ríe), es un refuerzo positivo de la conducta de
Pepe, que al verse reforzado positivamente, contará más chistes.

b. Reforzamiento negativo
Se refiere a cualquier evento cuya reducción o terminación aumenta la probabilidad de aparición de la
conducta inmediata anterior; es decir, que si la desaparición de un estímulo como consecuencia de una
respuesta resulta en que la respuesta ocurra en el futuro con una mayor probabilidad.
Siguiendo el ejemplo anterior: Si la consecuencia fuera que la gente no se ríe, el refuerzo sería negativo,
por lo que Pepe dejaría automáticamente de contar chistes. En el caso de que los chistes sean malos o
estén mal contados, la gente no se ríe; como consecuencia Pepe no contará ese tipo de chistes o no
contará nada más, lo que le obligará a eliminar la conducta inapropiada de contar chistes sin gracia o
contarlos mal.
Es la acción más inmediata del refuerzo negativo. Otra consecuencia podría ser que el fracaso obligara a
Pepe a escoger chistes mejores y aprender a contarlos mejor.

c. Castigo positivo
Se refiere a cualquier evento cuya presencia disminuye la probabilidad de ocurrencia de dicha conducta; es
decir, ante un estímulo aversivo se resta la conducta, la probabilidad de que ocurra será menor. Por
ejemplo: un niño tira su plato de comida, ante lo cual la madre le da un fuerte jalón de cabellos, entonces,
se observará que el niño tirará el plato de comida con menor frecuencia.

d. Castigo negativo
Se refiere a cualquier evento cuya reducción o desaparición disminuye la probabilidad de ocurrencia de
dicha conducta; es decir, ante la desaparición de un estímulo reforzador, la probabilidad de que ocurra la
conducta será menor (se le resta algo que es reforzante). Por ejemplo: al mismo niño que votó el plato de
comida, en lugar de golpearlo se le prohibirá ver la televisión, como consecuencia, dejará de botar el plato
de comida.

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