Page 50 - Biografia
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Yo Beto: Una Historia Chévere para contar
Y como si fuera poco, remate con
la mentira y la traición, si después
de leer estas lineas, desean ampliar
mas este relato conmigo, lo pode-
mos hacer con un par de granizados
néctar verde, que son tan ricos, sino,
dejemos así ahijadito.
Como dicen los secuestrados re-
cién liberados: “Lo que paso en la
selva... En la selva se quedo...! Y
esta aventura también... Mi vida
sentimental quedo allá...! Yo conti-
nuo narrando mi vida...! Por eso, pa-
semos la pagina y chin-chin con ron
santa fe. Ahh...! Que ricooo...!
Después de la fiesta de grado,
las fiestas de fin de año y el haber
conocido, a la que mas tarde se
convertiría en la madre de mis hi-
jos (no me cansare de repetirlo)
me hice la pregunta del millón, y
ahora que...?.
Estoy convencido que mi Dios nunca me ha dejado solo. Aparece un ángel de la
guarda, Jorge Romero, el esposo de Amanda (mi prima-hermana-madrina) un “man”
con carácter justo y siempre presente en mi vida, en el sitio indicado, a la hora indicada,
para (como le gusta a el) servir y ayudar a la familia.
Salí del bachillerato sin orientación profesional, con una serie de conocimientos en
psicología, filosofía, calculo, física, ética y otros que, como me dijeron en avianca cuan-
do fui a solicitar empleo, “Señor, vaya y aprenda un oficio y vuelva aquí”. Jorge Romero
fue pieza fundamental para decidir mi carrera universitaria, además, como la comunica-
ción con mi padre era tan complicada (nunca nos entendimos, según el psicólogo que
me atendió, era por la diferencia generacional), Jorgito también ayudo bastante en este
aspecto. Entre Amanda y Jorge me ayudaron, sin tratarme mal, a escoger mi carrera
profesional, comunicación social y periodismo. Ademas en esa época Jorge Romero
estaba vinculado como docente o tenia vínculos (ya no recuerdo) con la universidad
Jorge Tadeo Lozano, entonces como si fuera poco, me acompaño, guió e indico, como
debía presentar el examen de admisión; me animo y preparo para la entrevista perso-
nal con el decano de la facultad de comunicación (Evaristo Obregón).
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