Page 136 - Mitos y otros relatos de la Antigua Grecia
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acusarlo de haber trasladado al héroe sin cobrarle el importante estipendio que era habitual para los vivos.
Caronte (hijo de Érebo y Nix), se encargaba también de guiar a las sombras herrantes de los difuntos através del río Aqueronte (siempre que tuviesen un óbolo para pagar su viaje...) Por esa razón, en la Antigua Grecia a los cadá- veres se los enterraba con una moneda bajo la lengua ya que aquellos que no hubiesen tenido “como pagar su viaje”, vagarían cien años por las riberas del Aqueronte, tras los cuales Caronte recién accedería a llevarlos sin cobrarles...
En el Averno Heracles se encontró con muchas almas..., la de Teseo, la repulsiva Medusa y otros, siguiendo su viaje por el mundo de la oscuridad hasta poder verse con Hades, a quien no le gustaba la idea de que se llevase a su perro.
Heracles le preguntó a Hades si podría traer a Cerbero para luchar con él, sólo con sus propias manos, lo que el dios aceptó a disgusto. Heracles tuvo éxito, a pesar de llenar el aire con sus ladridos, logrando poner al can de espaldas y colgarlo, para después llevarle la bestia furiosa a Euristeo. A su llegada a Micenas, Euristeo presa del miedo al ver al animal, optó por liberar a Heracles y así pudo devolver a Cerbero al Averno, de donde, tras ardua tarea había logrado traerlo.
Después de que Hércules se instalase entre los dioses, Euristeo persiguió a los hijos del héroe, los que se refugiaron en Atenas y a raíz de eso se desencadenó una guerra entre atenienses y el ejército de Euristeo, donde murieron varios hijos de este rey de la Argólida y también una hija de Hércules llamada Macaria. Euristeo tuvo que huir en su carro, pero Hilo le dio alcance y lo mató.
Una vez cumplida la pena impuesta por el Oráculo, Tespio (padre de las cincuenta Tespíades) purificó a Heracles del terrible asesinato de sus pro- pios hijos habidos con Megara, mientras se encontraba perdido en aquella locura transitoria que había sido inducida por Hera.
el Fin y la Gloria de HércUles
Además de protagonizar tantas hazañas y trabajos como también batallar en tantas ocasiones llega a su final, el que está relacionado con su matrimonio con Deyanira, en su viaje por el inframundo.
Se cuenta que el héroe y Deyanira debían cruzar el río Averno, tarea que hacía el centauro Neso, con su bote. Primero lo cruzó a Hércules y en el siguiente
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