Page 96 - Mitos y otros relatos de la Antigua Grecia
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Como jefe de las Musas y director de su coro, actuaba como dios patrón de la música y de la poesía. Fue su hermano Hermes, quien creó la lira para él y así ese instrumento se convirtió en su atributo habitual.
Posteriormente, en la época helenística fue identificado por los griegos con Helios, dios del sol y de forma parecida a su hermana Selene, diosa de la luna, con quien se la equiparó.
Se le ofrendaron gran cantidad de templos y actualmente, luego de muchos siglos, su culto volvió a practicarse por seguidores del helenismo en Europa, América y sobre todo en Grecia.
eros y el mito de apolo y daFne
Cuenta la leyenda que Apolo, fue castigado por el joven Eros al sentirse éste burlado... por “jugar” con un arco y unas flechas...
Y así le dijo...
Dime niño, qué pretendes hacer con ese arma, más propia de mis manos que de las tuyas...? Yo se lanzar las flechas certeras contra las bestias feroces y los aguerridos enemigos... Conténtate con avivar con tus candelas un juego que yo conozco y no pretendas parangonar tus victorias con las mías...
El irascible Eros tomó dos flechas, una de oro y otra de plomo. La de oro inci- taba al amor y la de plomo al odio, entonces con la de plomo disparó a la ninfa Dafne y con la de oro lo hizo hacia el corazón de Apolo. Fue entonces que Apolo se inflamó de pasión por Dafne y en cambio ella lo aborreció.
Ya Dafne había rechazado a muchos potenciales amantes, dirigiendo todo su libido hacia la caza y la exploración de los bosques, a pesar de que su padre, un dios-rio (que para algunas tradiciones era Ladón y para otra era Peneo) le pidió que contrajera matrimonio pues estaba ansioso por tener nietos.
Ella, sin embargo le rogó a su padre que la dejase soltera como Artemisa, la hermana gemela de Apolo, a lo que él le respondió... que con su belleza sería imposible mantener alejados a sus pretendientes.
Apolo la hostigó permanentemente rogándole que se quedase con él, pero la ninfa siguió huyendo de él hasta que los dioses intervinieron y ayudaron a que Apolo la alcanzara. Ante la inminencia de ser atrapada por el dios, Dafne invocó a su padre para ser salvada y el dios-rio la convirtió en un arbusto de laurel, su cabello en hojas y sus brazos las ramas. Dejó así ella de correr, pues sus pies se enraizaron en la tierra y entonces Apolo abrazó sus ramas sin poder
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