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Bases psicopedagógicas de la enseñanza y del entrenamiento deportivo II – CFEM
DETERMINANTES INTERNOS:
Además de los aspectos exteriores, nosotros a nivel interno y debido a diferentes motivos, podemos tener más propensión para fijarnos en unos estímulos que en otros (los hombres, como bien es sabido, nos fijamos preferentemente en la cara de las mujeres, antes que en otras partes de su cuerpo).
Emoción: Los estímulos que provocan emociones de mayor intensidad tienden a atraer la atención del sujeto que los percibe. Es decir que si algo o alguien nos emocionan, tenderemos a fijarnos más en ellos que en otras cosas que no nos digan tanto (a nivel emocional).
Estado orgánico: Este factor se relaciona con las pulsiones que experimenta el individuo al momento de recibir la estimulación. Si una persona se encuentra sedienta, es seguro que le atraerán más intensamente los estímulos relacionados con la satisfacción de su necesidad.
Intereses: Esto se refiere a aquello que atrae la atención en función de los intereses que se tengan. Por ejemplo, un aficionado al esquí o al alpinismo se sentirá fuertemente atraído por una vista de montañas nevadas, mientras que un biólogo estará muy interesado por la imagen de una especie en peligro de extinción.
Curso del pensamiento: Independientemente de las pulsiones o de los intereses del individuo, si el curso de su pensamiento se encuentra siguiendo ciertas ideas y un estímulo relacionado se le presenta en ese momento, este último captará su atención en forma inmediata. Si por ejemplo estás pensando en que te gustaría comprarte un coche determinado y de repente se cruza por tu camino un coche igual que el que te querías comprar, te fijarás más que en los otros coches.
OTROS FACTORES A TENER EN CUENTA DE LA ATENCIÓN:
Además de lo ya visto, hay otra serie de factores a tener en cuenta como son los siguientes:
La capacidad de atención de los niños es limitada. No se puede pretender que atiendan durante mucho tiempo o a un número elevado de estímulos a la vez (son dispersillos los muchachos). Por ello, el entrenador debe: organizar ejercicios cortos, cambiando con frecuencia de uno a otro; dar explicaciones breves para que los niños no estén parados y