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La percepción en los trabajos de fuerza está determinada por 3 variables fundamentales: el porcentaje de la resistencia (% 1RM), el trabajo total producido por una serie o grupo de series con un peso estándar (repeticiones totales) y la longitud y carácter de la pausa de recuperación (densidad).
La percepción se relaciona con la cantidad de unidades motoras activadas y la frecuencia de activación. Tiende a subir con los pesos más altos o series al fallo.
Diversos autores han demostrado una asociación entre la percepción del esfuerzo con concentraciones de lactato sanguíneo y la actividad eléctrica muscular, lo que la avala como herramienta de control en los entrenamientos de fuerza y se acepta la Escala de Borg en cualquiera de sus variantes para controlar la exigencia de los entrenamientos de fuerza.
Existen otros estudios como el realizado por Robertson y col (2003) con la escala OMNI-Resistance que también la valida e incluso ofrece ventajas sobre la anterior.
La utilización de la escala de percepción del esfuerzo requiere de un período de adaptación y aprendizaje, con adecuadas instrucciones sobre su aplicación. Este periodo ha sido valorado entre 8 y 12 sesiones de entrenamiento. En general se debe indicar asociar el valor 0 a la sensación que se tiene al no realizar ningún tipo de esfuerzo, mientras que el valor 10 se correspondería a un esfuerzo máximo que lleva al agotamiento y no permite seguir realizando ningún trabajo más.
2.4. Aspectos mecánicos para planificar el entrenamiento de fuerza
Hace referencia a la selección tanto de medios como de los ejercicios a realizar en las sesiones de entrenamiento.
 Medios. Se diferencian en la manera que actúan sobre el sistema neuromuscular y se distinguen los siguientes:
o De acción gravitacional. Actúan por medio de la fuerza que la masa de estos objetos determina al caer por la acción de la gravedad.
 Pesos libres. El peso permanece fijo durante todo el movimiento pero la distancia horizontal varía constantemente respecto al eje de giro articular.
 Máquinas convencionales y de palanca. Mismo principio que los pesos libres pero permiten mayor control y localización en la ejecución.
o De acción inercial. Máquinas convencionales que ofrecen la resistencia de manera que la acción muscular se realiza perpendicularmente en lugar de contra la gravedad. Al actuar por medio de cables y poleas los momentos de fuerza pueden variar en función de su tamaño, distancia del eje de giro, etc.
o Isotónicos. Funcionan con un freno mecánico que les permite mantener la misma magnitud de los momentos de fuerza a lo largo de todo el recorrido articular. No suelen encontrarse en centros deportivos convencionales sino en centros de alto rendimiento como medios de evaluación.
o De fricción. La resistencia de oposición es proporcional al producto entre el coeficiente de fricción que hay entre los dos cuerpos en contacto y la fuerza que las oprime para mantenerlas juntas. Hablamos de las bicicletas ergométricas, donde hay que hacer más fuerza para vencer su inercia al principio del movimiento que para mantener la aceleración una vez comenzado.
FACTORES FISIOLÓGICOS DEL ALTO RENDIMIENTO – TEMA 8 9