Page 226 - [1library.co] l la era de las maquinas espirituales kurzweil
P. 226
terísticas de los sonidos. Se han superado todas las limitaciones de los
(tocar simultáneamente) y secuenciar. Además, ya no es necesario too
polifónicamente todos los sonidos, se los puede superponer en capas
dos, los brazos, los pies, la boca y la cabeza. Ahora es posible ejecutar
dad y rl'cupernr a aIra, sin cambiar por dio la altura ni las otras carac-
acústicos, está
viejos tiempos, lo cual permite hoya los adolescentes lograr en su dor-
cambio
surgiendo una nueva generación de controladores sin ningún parecido
cal' la música en tiempo real, sino que se la puede ejecutar a una veloci-
intenta mejorar los factores humanos de creación de música con los de-
tico o electrónico. Hay nuevos controladores que emulan la técnica de
aprendido a tocarla, puede ahora utilizar un controlador electrónico
condi-
gazón se ha roto. Si a usted le gusta el sonido de la flauta, haya o no
no sólo crea los sonidos correspondientes a una variedad de flautas,
de vientos que suena exactamente como una flauta acústica, pero que
vaban de los requisitos físicos de la creación de sonidos. Ahora esa li·
sino también prácticamente a los de cualquier otro instrumento, acús-
ejecución de los instrumentos acústicos más populares, incluso el pia-
no, el violín, la guitarra, los tambores y una gran variedad de instru-
no estamos limitados por las
con ningún instrumento acústico convencional, pero que en
medios
por
sonidos
de
mentos de viento. Dado que ya
creación
de la
físicas
ciones
El poder de estos sistemas se refleja en la originalidad, a menudo
mática durante toda la obra de arte sea el pintor robótica de Harold
ja ni se ha lanzado a correr desnudo por la calle. Todavía no tienen
en mitorio el sonido de una orquesta sinfónica o de una banda de rock. artes. Esta UN TEST DE TURING MUSICAL de Universidad de la profesor de música Larson, Steve 1997, En para lo Oregón, dispuso una variante musical del Test de Turing, cual propuso a un público que tratara de determinar cuál de tres pie- zas musicales había sido escrita p
manos, nunca se puede saber qué harán en el futuro estos sistemas
sorprendente, de un giro lingüístico, de una forma o de una melodía.
Su debilidad, una vez más, se relaciona con el contexto o con la falta
de contexto. Puesto que estos ordenadores creadores son deficientes
tos, que Cohen ha construido a lo largo de tres años, regla por regla.
nudo pierden el hilo del pensamiento y divagan de manera incohe-
en experiencia del mundo real de sus contrapartidas humanas, a me-
La era del artista cibernético ya ha comenzado, aunque aún se en-
cuentra en una fase inicial. Lo mismo que sucede con los artistas hu-
creativos. Sin embargo, hoy por hoy, ninguno se ha cortado una ore-
rente. Tal vez el mayor éxito en el mantenimiento de la coherencia te-
. Cohen, llamado Aaron, que analizaré más adelante. La razón princi-
pal del éxito de Aaron es el rigor de su extensa base de conocimien-
convertido de televisión-
INTERVENGA EN UNAjAM SESSION CON SU ORDENADOR
ha
los
sistemas películas o Hasta hace muypoco, la técnica de ejecución instrumental estaba
cuerpo para exhibir este tipo de creatividad.
de estos grandes colaboradores de los artistas humanos y, de esta manera, los ordenadores han tenido un efecto transformador en las tendencia llega a su máximo desarrollo en las artes musicales. La mú- sica siempre ha utilizado las tecnologías más avanzadas a su disposi- ción: en el siglo XVlll, los oficios de ebanistería; en el XIX, las indus- trias de elaboración d
originalidad -grabaciones y bandas sonoras pañante y progresiones y variaciones melódicas.
La frecuente 224