Page 1211 - JULIO
P. 1211

Mucho y para siempre.                                                                       8


                  Y quiero que, así como yo te siento dentro de mí a cada momento,
                  tú también me sientas en el agua que mata tu sed y en el viento
                  que refresca tu piel...


                  Tú eres mi bella inspiración.

                  Es  preciso  el  momento  para  volcar  mis  sentimientos  en  este

                  humilde papel, donde lo mágico se haga eterno, celebrando este
                  bello día que me llena de felicidad, pues ver tu carita risueña me

                  produce alegría y bondad; y verte tan lozana en esta vida, te hace
                  dueña de la juventud y de mi amistad.


                  Eres la primavera que le da dulzura a estos versos, eres la mujer
                  cuyas manos tienen la delicadeza para aliviar mis tristezas, y las
                  mías  poseen  el  amor  que  necesitas  para  endulzar  tus  proezas,

                  haciendo del paisaje el lienzo más hermoso reflejando tu belleza.

                  He  recorrido  mil  distancias,  pero  ningún  camino  es  tan  bello

                  como ir de tu mano, he tropezado mil veces, pero ahí has estado
                  siempre  tú,  cuando  gritaba  de  dolor;  fuiste  un  apoyo

                  constante…por esto doy testimonio de fe y amor como humilde
                  escribano,  de  este  sentimiento  lindo  que  me  embarga,
                  expresándote mi cariño con mis propias manos.


                  Comienzo a rimar la historia del por qué eres el amor de mi vida,
                  la maga que hechizo de encanto mi mundo, haciendo de éste un

                  paraíso, convirtiéndome en tu títere cada vez que sientes que por
                  tus  manos  me  deslizo,  sintiéndote  ahora  sí  segura  que  nunca

                  pronunciaré una despedida.

                  Hablar de ti es incansable, pues tú eres mi inspiración, tú le das

                  alegría al ser que yo vivo, tú eres un encanto y divinidad mujer,
                  tú me provocas, me emocionas, haces nacer en mí la pasión; cada
                  vez bajo mis sabanas cuando tu olor percibo, sumergiéndonos en

                  la fuente de vida y placer.

                  He de terminar estos humildes versos, sellando en ellos mi más

                  grande ilusión, ven camina siempre junto a mí, te lo pido de favor,
   1206   1207   1208   1209   1210   1211   1212   1213   1214   1215   1216