Page 1657 - JULIO
P. 1657

Sólo  tú  me  haces  feliz,  caminaremos  por  el  prado,  nuestros  pasos  se              7
                  detienen… una sonrisa nerviosa y sudor en las manos esperando un beso

                  que calle mi boca cuando te digo siempre… «¡Te cielo mi amor, te cielo!».

                  Nuestras  miradas  cómplices  se  encuentran  y  bajito  me  susurras  mi
                  amor…  sí,  yo  también  te  cielo  y  sonrío bajito,  nos  juramos  amor,  nos

                  decimos promesas que sólo nosotros sabemos decir…

                  – Mi amor – Mi corazón – Mi lealtad Todo es para ti, este nuestro amor
                  es un regalo del cielo, y contigo lo quiero vivir.


                  Hechizo de amor.

                  Es preciso el momento para volcar mis sentimientos en este humilde papel,
                  donde el mágico se haga eterno… celebrando este bello día que me llena

                  de felicidad, pues ver tu carita risueña me produce alegría y bondad, y verte
                  tan lozana en esta vida, te hace dueña de la juventud y de mi amor.

                  Eres la primavera que le da dulzura a estos versos, eres la mujer cuyas

                  manos tienen la delicadeza para aliviar mis tristezas, y las mías poseen el
                  amor  que  necesitas  para  endulzar  tus  proezas,  haciendo  del  paisaje  el
                  lienzo más hermoso reflejando tu belleza.


                  He recorrido mil distancias, pero ningún camino es tan bello como ir de tu
                  mano, he tropezado mil veces, pero ahí has estado siempre tú, cuando

                  gritaba de dolor, fuiste un apoyo constante…por esto doy testimonio de fe
                  y  amor  como  humilde  escribano,  de  este  sentimiento  lindo  que  me
                  embarga, expresándote mi cariño con mis propias manos.


                  Comienzo a rimar la historia del por qué eres el amor de mi vida, la maga
                  que  hechizo  de  encanto  mi  mundo,  haciendo  de  éste  un  paraíso,
                  convirtiéndome en tu títere cada vez que sientes que por tus manos me
                  deslizo.


                  Hablar de ti es incansable, pues tú eres mi inspiración, tú le das alegría al
                  ser que yo vivo, tú eres un encanto y divinidad mujer, tú me provocas, me

                  emocionas, haces nacer en mí la pasión, cada vez bajo mis sabanas cuando
                  tu olor percibo, sumergiéndonos en la fuente de vida y placer.
   1652   1653   1654   1655   1656   1657   1658   1659   1660   1661   1662