Page 319 - Orestiada. Agamenón. Las Coéforas. Las Euménides
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LAS COÉFORAS
¡Mira la descendencia huérfana del águila paterna,
de aquel que murió en los espirales y en los anillos
de la terrible víbora! ¡A los huérfanos
la hambruna del hambre oprime, pues no son adultos 250
para traer la caza al paterno nido!
De tal manera a mí y a ésta, me refiero a Electra,
puedes vernos: progenie sin padre,
ambos huyendo de la propia casa.
Y si del que sacrificaba en tu honor y en demasía te honraba 255
aniquilas los polluelos, siendo su padre, ¿de dónde
obtendrás suntuosa ofrenda de similar mano?
Y si la descendencia del águila aniquilas, una vez más
no podrás enviar señales confiables para los mortales;
Y si por tu culpa se seca por completo este tronco real, 260
ni en los días de los sacrificios de los bueyes podrás servir.
Protégenos: de lo pequeño puede levantarse una magnánima
casa, aunque parezca que ahora por completo está destruida.
Corifeo
¡Oh niños, oh salvadores del hogar paterno!
¡Guarden silencio, para que nadie se entere, oh hijos, 265
y gracias a su lengua todo esto dé a conocer
a los que gobiernan! ¡A estos viera yo un día
muertos sobre la chispeante resina del fuego!
Orestes
No me abandonará el poderoso oráculo
de Loxias, porque me ordenó correr este peligro, 270
y me dijo en voz alta vociferando aflicciones
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