Page 34 - SALVADOR BORREGO ARMA ECONOMICA
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ARMA ECONOMICA
Tal acusación tenía fundamento muy claro en muchos
casos, como en el de Polonia, a cuyo régimen marxista
se le acababa de conceder una prórroga de 1 O años para
que hasta 1993 empezara a pagar los 25,000 millones
de dólares que le habían prestado más de quinientos ban-
cos del mundo occioenta1. Cuba y Rumania se encontra-
ban en una situación semejante. Cuba debía ya 3,500
millones y Rumania 10,000 millones.
La agrupación "Abogado Público", de Nueva York,
también se sumó a la campaña, a través de tarjetas pos-
tales. "¿Por qué prestan a comunistas y a hostiles a
Estados Unidos como Irán, Laos, Tanzania y
Monzabique?" Pequeños propietarios, granjeros y ban-
cos locales dieron apoyo a esa campaña.
Por la otra parte, Anthony Saloman, presidente de uno
de los grandes bancos de la Reserva Federal, y Paul A.
Volcker -presidente de la propia Reserva y miembro de
la Comisión Trilateral- abogaron en favor del suminis-
tro de más dólares para que el Fondo Monetario siguie-
ra prestando a los países deudores. La Cúpula Financie-
ra se empeñó y logró que tal cosa fuera aprobada. (Por
cierto que, en el caso de México, dicha Cúpula vio con
simpatía que el gobierno estatizara la banca).
Entretanto, en los países endeudados hubo voces ais-
ladas contra las severas condiciones del Fondo, consti-
tuido ya en un legislador internacional, por encima de
las legislaciones de cada país. En una reunión de Bogo-
tá se dijo que el Fondo llega a exigir cambios en el per-
sonal administrativo y transformaciones en la política
interna, además de una serie de medidas económicas
que crean carestía, desempleo y abatimiento de la de-
manda y la producción. (l> •
El experto norteamericano Ernest Feder comentó que
dudaba que las deudas sean pagadas alguna vez. Pero aun-
que lo sean, dijo, sólo podrán cubrirse con una sobre-ex-
plotación del proletariado rural y urbano del Tercer Mundo.
< > 19 de Nov. de 1983. Agencia ANSA.
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