Page 93 - SALVADOR BORREGO ARMA ECONOMICA
P. 93

SALVADOR BORREGO


                     ción no ponemos como el más fuerte de los cimien-
                     tos una ilimitada lealtad recíproca,  una increíble fi-
                     delidad mutua".
                  Respecto a la ayuda que Alemania estaba prestando a
               España en su lucha armada, Hitler dijo:  "Lo único que de-
               seamos nosotros es que no haya en España un Estado bol-
               chevique  ... Si un alemán presta servicios allí es porque es
               necesario para Alemania, visto a largo plazo.  Y  que si  al-
               guien puede morir allí,  muere por Alemania.  Y si  la lucha
               por el triunfo del movimiento ha costado cientos de caídos;
               y si en la lucha por Alemania cayeron dos millones de per-
               sonas (primera guerra mundial); y si han muerto miles du-
               rante las luchas causadas por los disturbios en el interior,
               también en el futuro tendrán que seguir muriendo alema-
               nes.  iAY del pueblo en donde los hombres no se muestran
               ya dispuestos a seguir sacrificándose por la comunidad!"




               UNA RARA EXPLICACION         La Legión Cóndor pudo ser en-
               DE  ECONOMISTAS              viada  a  combatir en  España
               (  193 7) porque Alemania ya era suficientemente fuerte para de-
               safiar con ese acto a la URSS, a Francia y a las brigadas interna-
               cionales. ¿Cómo una economía que 4 años antes se hallaba
               profundamente postrada pudo recuperarse a tal grado?
                  Tanto economistas marxistas como liberales, de la es-
               cuela de Chicago o de la escuela de Viena, han dado una
               explicación muy simple sin querer entrar en ningún exa-
               men serio: la economía alemana había resurgido -dicen-,
               simplemente porque era una economía de guerra que fa-
               bricaba armas y que daba trabajo a millones de personas.
               Y nada más.
                  Entonces, ¿bastaría que cualquier país en crisis produ-
               jera armas para trocar la crisis en prosperidad?
                  Por  el  contrario,  la  industria  de  armamentos era una
               enorme carga, un lastre, que sólo una economía extraordi-
               nariamente fuerte podía soportar. Sobre este punto Hitler
               dio la siguiente explicación:


               92
   88   89   90   91   92   93   94   95   96   97   98