Page 259 - Egipto Tomo 1
P. 259
EL CAIRO 247
la historia de otros
| pueblos. ¿Son más
grandes los hechos
de un Decio-Mus, de
un Curcio, de un Ar-
noldo de Winkel—
ried, que el llevado
M á cabo por Zubeir,
que sacrificó su exis-
tencia á fin de alean—
zar para los suyos la
__ victoria? ¿Cabe ma-
yor valor que el de
arrimar una escala
á la desportillada
muralla, trepar por
ella con el alfanje en
la mano, y puesto el
pié en el adarve gri-
tar con todas sus
fuerzas Alá akbar
(Dios es grande), á
cuya mágica voz con-
testaron sus cama-
radas con gran clamoreo, con lo cual imagi-
nando los sitiados que habían asaltado la mu-
ralla fuerzas numerosas, diéronse á la fuga,
quedando con ello los árabes dueños de Babi-
lonia?
Los vencidos se retiraron á la isla de Roda,
rompieron los puentes que la unían á la tierra
firme y el gobernador Makankas entró en
,
tratos con los vencederos, enviando á dos de
TIENDA DE AMR
los suyos en calidad de embajadores al campo
musulmán, en el cual los retuvo Amr algunos dias, tratándoles con grandes agasajos, á fin
de que pudiendo hacerse cargo de la disciplina y piadosos sentimientos de sus soldados,
halláronse en condiciones de referir á los suyos lo que habian visto. La vida estrictamente
religiosa v por todos conceptos digna que llevaban los creyentes, hizo mella en el ánimo de
los emisarios: v después de algunas discusiones y de insignificantes escaramuzas concluyóse