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ISSN 1989–4104                  ARQUEOLOGIA IBEROAMERICANA 4 (2009)                                 13

         tos), independientemente de que todos los depósitos en  variadas piezas óseas; también se aprecian diferencias
         Canímar Abajo están en un espacio cerrado por consti-  de preservación entre individuos dispuestos muy cerca
         tuir entierros directos, se deben a la posición anatómica  entre sí donde, aparentemente, el sustrato podría haber
         que se presenta para cada depósito.                  ejercido la misma acción sobre todos ellos. Sin embargo,
            En cuanto a los factores de modificación tafonómica  la existencia de micronichos particulares (Rodríguez
         extrínsecos, se debe tener en cuenta la acción natural (sis-  2006, comunicación personal) para determinados indivi-
         tema radicular de las plantas, pH, humedad, acción bio-  duos hace contrastar la acción tafonómica.
         turbadora, etc.) y/o antrópica (procedimientos para la pre-  Un ejemplo es el del subadulto (niño) E-2 (S1) de la
         paración de los enterramientos, remoción intencional, re-  campaña de diciembre de 2007 (ver fig. 3A-B), con orien-
         acomodo, aprovechamiento y reutilización del espacio  tación de la C-114 a la C-91. El estado de preservación
         sepulcral, entre otros). Muchos de estos fenómenos pue-  de dicho individuo es muy bueno y son varias las razones
         den originarse de manera natural o no intencional como  que inciden en este caso. Sin embargo, muy cerca y casi
         son el trampling (pisoteo), la compresión por carga litos-  al mismo nivel, en la cuadrícula C-115, se encuentran los
         tática, transporte durante el proceso de sedimentación,  individuos E-3, E-4 y E-5 de la misma campaña (ver fig.
         etc.                                                 5B), con algunos de sus huesos en la C-114 y en estos se
            Se identificaron, además, otros mecanismos de altera-  evidencian diferencias respecto a E-2 y entre ellos, sien-
         ción tafonómica resultantes de los efectos microscópi-  do el E-4 el más afectado por fenómenos tafonómicos.
         cos y macroscópicos de la diagénesis que intervienen du-  Otro factor a tener en cuenta es la edad del individuo.
         rante las etapas bioestratinómica y fósildiagenética, que  La resistencia y durabilidad de sus componentes óseos
         inciden en la preservación diferencial de los elementos o  deberían sufrir la acción más acentuada de los mecanis-
         entidades registradas para estos segmentos. Sin embar-  mos de alteración tafonómica y, sin embargo, no ocurre
         go, las modificaciones microscópicas requieren de un tra-  así. Las cuadrículas donde se encuentra E-2 están prote-
         bajo más minucioso para llegar a describir dichos proce-  gidas en gran medida por dos grandes rocas (ver fig. 1C).
         sos (algunos de ellos a nivel molecular) y las causas de  Éstas fueron parte del farallón y debieron precipitarse
         sus efectos, los cuales trataremos de abordar en futuras  antes del entierro de E-2. De ser así, podría inferirse que
         investigaciones, aunque no dejaremos de citar algunos  la colocación de este individuo llevó la intención de re-
         ejemplos que contribuyan a este análisis.            forzar la protección del mismo respecto al resto. De cual-
            En este caso, centraremos la atención fundamentalmen-  quier forma, antes o después, la posición de ambas for-
         te en las de carácter macroscópico que, de manera gene-  maciones brinda protección física a E-2, elemento que
         ral, son visibles in situ e inciden finalmente en la preser-  pudo incidir en la disminución del trasiego en este sector
         vación diferencial de los depósitos humanos.         del área así como del trampling. La cavidad neurocra-



         EL SEGMENTO S1 Y LOS
         MECANISMOS DE
         ALTERACIÓN
         TAFONÓMICA


            Debemos partir de que este segmen-
         to está mayormente expuesto a un con-
         junto de acciones modificadoras que
         el resto de los segmentos, por encon-
         trarse más cerca de la superficie. Esto
         trae consigo que el nivel de alteracio-
         nes tafonómicas aumente de manera
         general en S1 con respecto a S2 y S3.
            Se puede observar que para un mis-
         mo esqueleto existen diferencias con-
         siderables en la conservación de sus



         Fig. 6. Restos óseos humanos en el límite de
         S1 y S2.
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