Page 340 - Águila Blanca_Neat
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La Gran Tribulacion

                 Ellos tendrán el poder para cerrar los cielos a fin
                     que no llueva en los días de su profecía…

            943.  ¡Eso  sí  es  poner  una  interrupción  a  la  naturaleza!
           Ahora,  ¿por  cuánto  tiempo  cerró  los  cielos  este  hombre,
           Elías?  Tres  años  y  medio,  exactamente  (156).  Ahora,
           ¿cuánto tiempo dura la última parte de la semana setenta
           de  Daniel?  Tres  años  y  medio,  exactamente.  ¿Qué  hizo
           Moisés? Convirtió las aguas en sangre. Hizo toda esta clase
           de  milagros, exactamente como está predicho que  sucederá
           bajo  este  Sexto  Sello.  Y  acá  están  en    Apocalipsis  11,
           haciendo estas mismas cosa. ¡Amén! Allí tienen tres lugares
           distintos  en  las  Escrituras,  ligando  la  cosa  perfectamente.
           Allí está. ¡Amén!   [EL  SEXTO  SELLO,  de la  Revelación  de  los
           Siete  Sellos,  páginas    396,  397,    párrafos      296,  303, 304,  305,  306.
           Predicado  un  sábado  por  la  noche,  23  de  marzo  de  1963  en  el
           Tabernáculo Branham, en Jeffersonville, Indiana, E.U.A.]

            944.  ¡Cuántas experiencias he tenido! Yo les señalé a los
           hermanos,  al  Hermano  Palmer  y  a  los  demás,  los  lugares.
           Donde  el  águila,  ustedes  saben,  cuando  lo  vi  elevarse  ese
           día,  ustedes  saben,  y  cómo…  Esos  son  los  lugares  donde
           todo eso ocurrió. Para mí, es algo temperamental. He tenido
           tantas grandes experiencias con  mi Señor en esas montañas.

            945.  Entonces mientras yo estaba sentado allí, y  luego  la
           cellisca  comenzó  a  caer,  y  los  vientos  soplando,  de  esa
           manera. Y yo dije: ―Bueno, conozco el camino hacia abajo,
           pero  será  mejor  que  salga  de  aquí  ahora  mismo.‖  Y  miré
           hacia  abajo  y  ya  no  podía  ver  los  valles;  esas  nubes
           soplando  y  doblándose,  y  la  cellisca  soplando.  Y  allí
           estaba, ¡la ventisca! Fue anunciada por varios días: ―¡Una
           gran ventisca se avecina!‖



           (156) Santiago 5:17

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