Page 172 - Libros de Caballerías 1879
P. 172

AMADÍS DE GAULA


         hallaría hombre  otro  tal  caballero como  el Rey;
         pero yo no seré caballero sino de vuestra mano.
           —Pues que así quieres —dijo Amadís— así sea,
         e faz lo que te digo.
           A cabo  de  tres  días que  los  reales  se  asen-
         taron, el emperador Patín se aquejaba mucho por-
         que  la  batalla se diese; Amadís  e Agrajes  e don
         Cuadragante e todos los otros caballeros asimesmo
         aquejaban mucho  al rey Perión que  la  batalla se
         diese e que Dios fuese juez de la verdad. Pues  el
         Rey no lo quería menos que todos, mas habíalo de-
         tenido  hasta que  las cosas estoviesen en  disposi-
         ción cual convenía, e luego mandaron apregonar que
         todos al alba del día oyesen misa e se armasen, e
         cada gente acudiese a su capitán, porque la batalla
         se daría luego, e asimesmo se  fizo por los contra-
         rios, que luego lo supieron.
           Pues venida el alba, las trompetas sonaron, e tan
         claros se oían los unos a los otros como  si juntos
         estoviesen. La gente se comenzó a armar e a ensi-
         llar sus caballos e por  las tiendas a  oír misas  e
         cabalgar todos e se ir para sus señas.
           Pues a esta hora llegó Gandalín armado de armas
         blancas, como convenía a caballero novel, e se fué
         donde su señor Amadís estaba. Cuando Amadís  le
         vio así venir salió de la batalla a  él, e tomóle con-
         sigo, e fuese donde el rey Perión, su padre, estaba,
         e por el camino le fué aconsejando como debía con-
         ducirse en aquel primer combate en que iba a tomar
                               168
   167   168   169   170   171   172   173   174   175   176   177