Page 7 - El maquinista de la General
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Localizaciones históricas
El segundo objetivo de verosimilitud histórica era encontrar las localizaciones
exactas donde ocurrieron los hechos. La persecución se desarrolló sobre la vía
férrea que une Atlanta y Chattanooga, pero en 1926 ese tramo del ferrocarril
había sido largamente modernizado, de forma que ni de lejos podía sugerir que
la acción se desarrollaba en torno a 1860. Además, Keaton estaba decidido a
lograr que buena parte de su película se desarrollara en movimiento, sobre el
tren, y por lo tanto harían falta largos tramos de vías férreas paralelas, una para
ejecutar la acción y otra para rodarla.
Hicieron falta algunas semanas de exploración para que el realizador encontrara
lo que necesitaba en los alrededores de Cottage Grove, en Oregon, que por
tratarse de una zona maderera estaba llena de antiguos tendidos ferroviarios. A
finales de mayo de 1926, un pequeño ejército comandado por Keaton y su jefe
técnico Fred Gabourie, responsable de todos los efectos mecánicos del filme, se
trasladó a vivir a Cottage Grove con dos claros objetivos: en primer lugar,
reconstruir en sus alrededores la calle principal de un pueblo sureño; y en
segundo lugar, ajustar y poner a punto las tres locomotoras antiguas que fueron
localizadas y adquiridas en sus inmediaciones. Envejecidas un poco más para
completar su parecido, aquellas locomotoras de la vieja empresa maderera se
asemejaron por completo a los modelos utilizados durante la Guerra Civil. Una
de esas máquinas sería «The General», otra «The Texas» (la locomotora
perseguidora que conduce el personaje de Keaton), y la tercera se utilizó para
tareas de apoyo logístico.
Preocupación por la fotografía
La fotografía se vio
también involucrada en la
obsesión realista del
director.
Para proporcionar mayor
estabilidad a las cámaras
que iban a filmar
los travellings de los
ferrocarriles en
movimiento, Keaton las
dispuso en automóviles
atados sobre vagones de
carga, para que los
amortiguadores de los
vehículos asimilaran
buena parte de las
vibraciones del recorrido. Por otra parte, los tonos y matices de la fotografía
trataban de recrear los ambientes y las imágenes que el público tenía asociadas
a la Guerra Civil; en concreto, la textura y la riqueza visual del filme se inspiraron
en las célebres fotografías que Matthew Brady hizo durante el desarrollo del
conflicto, y a ellas se ajustaron con un impecable rigor escenográfico. Esa
precisión se aplicó también a la utillería, al vestuario, al diseño de los decorados
y a toda la parafernalia militar. Hasta el cañón de aspecto cómico que aparece
en las fotografías más difundidas de la película fue inspirado en un modelo