Page 22 - Revista 3ES OCTUBRE 2018- II
P. 22

Las caras de la muerte antigua


                                                 Julieta Catalán


                                                       Como parte de la vida misma
                                                   nos acompaña la muerte, el único
                                                   hecho del que tenemos certeza y
                                                   las antiguas culturas lo tenían claro.
                                                       Hace más de 6000 años, los
                                                   egipcios levantaron una ciudad en
                                                   honor a sus muertos, una de las 7
                                                   maravillas del mundo antiguo y la
                                                   única que permanece en pie, se
                                                   trata de las pirámides del antiguo
                                                   Egipto. Para esta civilización anti-
                                                   gua los ejes principales eran, el río
                                                   Nilo, el sol y la muerte. Sus mani-
                                                   festaciones artísticas nos revelan
                                                   el acontecer después de la vida.
                                                   Incluso tenían un dios destinado a la
                                                   muerte: Anubis, el dios chacal, dios
                                                   de la muerte, de la vida siguiente.
          Anubis, Dios de la muerte                También tenían a la primera momia
              para los Egipcios
                                                   Osiris, diosa de la resurrección y de
                                                   la agricultura entre otros atributos.
                                                                                                                                      Caronte: el barquero infernal de las almas de los muertos.
                                                                                                Mientras tanto en la antigua Grecia, Ha-
                                                                                            des, dios del inframundo, se daba a la tarea
                                                                                            de cuidar la morada de los muertos. Para
                                                                                            llegar hasta ahí, se tenía que atravesar un
                                                                                            río, Aqueronte, en una barca tripulada por
                                                                                            Caronte, quien pedía su paga, una mone-
                                                                                            da por el traslado, la cual se colocaba en la
                                                                                            lengua del difunto o en los párpados. Al otro
                                                                                            lado esperaba Can Cerbero, perro guardián
                                                                                            de tres cabezas, quien vigilaba que ningún
                                                                                            muerto saliera. Ahora bien, una de las per-
                                                                                            sonificaciones de la muerte era Tánatos, una
                                                                                            muerte suave, gemelo de Hipnos, el sueño.
                                                                                            La muerte violenta estaba en manos de las
                                                                                            hermanas Keres.

                                                                                                Para los romanos, grandes copistas del
                                                                                            mundo griego, la muerte era Mors, pero el
                                                                                            dios que protegía este espacio era Plutón,
                                                                                            el equivalente a Hades griego. Lo que pasó
                                                                                            en Roma es que se mezclaron muchas tra-
                                                                                            diciones, como la momificación egipcia, por
                                                                                            ejemplo, ahí, en vez de poner máscaras a los   En la mitología romana, Mors era la personificación de la
          Entre los templos que se construyeron del lado oriental del Nilo, de cara al amanecer, se encuentra el de Luxor, en pleno centro   difuntos se realizaban retratos y se colocaban   muerte.
          de la ciudad. Del lado contrario, por donde el sol se oculta, yace representando el mundo de los muertos, la tierra en la que se
          levantaron grandes tumbas y santuarios mortuorios de faraones.                    en el rostro simulando la vida.

       20                                                                                                                                                          21
   17   18   19   20   21   22   23   24   25   26   27