Page 29 - El gran capitán

Natalia, toda inocente, hizo caso a su hermano y cuando estaba con las manos en el pelo y la cara torcida le gritó su hermano:
Pablo se fue a su cuarto mientras su madre preparaba la cena.
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- Muy bien, hija.
- Y a Flami, también, le gusta mucho el agua. Cuando nos bañamos juntos en la bañera nada muy bien.
- Es un peluche, no sabe nada, dijo Pablo.
- Tienes envidia porque nada mejor que tú, respondió rápidamente Natalia.
- Mamá, ¿te puedo hacer una pregunta?, dijo Pablo.
- Sí, claro. Todas las que quieras.
- ¿Y qué enfermedades curaba Pies fuertes?
- De todo. Pero sobre todo en aquella época había muchos virus y no había vacunas.
- ¿Cómo ahora con el coronavirus?
- Sí algo parecido, pero no tan extendido.
- ¿Qué es el coronavirus? Pregunto Natalia.
- Muy fácil, respondió Pablo. Mira, agárrate las trenzas, saca la lengua y mírate la nariz.
- ¡¡Tú eres el coronavirus, feaa!!!
- ¡Mamaaaaá! Pablo, me ha llamado fea.
- Oye, Pablo, no me ha gustado nada tu respuesta ni tu actitud. Pide ahora mismo perdón a tu hermana y vete a tu cuarto a pensar.
- ¡Perdón, Natalia, perdón!
Pablo no cambia y vuelve a jugar a la Play, pulsa aquí (17)
Pablo reflexiona y vuelve a ser dócil, pulsa aquí (5)