Page 13 - CAMINOS SIN GLORIA
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Autor: Juan Carlos Cuervo Otálora
Quizás sicólogos o siquiatras coincidan que todas
las situaciones presentadas en una familia como la mía y que
se dio a temprana edad en unos niños pues influencia
muchos de los comportamientos que en un momento o en
otro se ven aflorados ya sea en la juventud o en la adultez;
por lo menos en la juventud y niñez si se dio fue reprimido
por las golpizas constantes y en las obligaciones que
nosotros los dos únicos hijos en aquel entonces debíamos
cumplir a merced de un castigo de no cumplir las reglas.
Pues bien cada sicólogo o erudito en temas de este rango
también concluiría que la situación social y de educación no
contribuyo mucho al buen desarrollo familiar; he sabido
durante mucho tiempo y es conocido que muchos hijos en
estas situaciones desarrollan otras actividades que los hacen
mejorar su estilo de vida; quizás la garra de no seguir en lo
mismo y no trasmitir eso mismo a otras generaciones y son
ejemplos de superación no solo personal sino social.
El suceso que conmociono a las dos familias y del
cual no se porque solo a mi hermana y a mi nos toco
porque a mis demás primos, tíos, padrinos, abuelos etc.
aunque en su momento quizás expresaron su inconformidad
dejaron a un lado ese incidente para no volverlo un
problema familiar y vivir sanamente con otro tipo de
problemáticas comunes en su seno familiar; a nosotros en
cambio nos toco vivir por casi 30 años y mas es sacar en
cara por cada uno de nuestros padres la situación que los
llevo a unirse y el suceso que conmociono a las dos familias,
problema tras problema que se suscitaba entre ellos salía a
relucir ese evento y sus consecuencias.
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