Page 10 - REVISTA
P. 10

"Eres gordo/feo/tonto"

            Nuestros hijos creen todo lo que les decimos. Somos su fuente más confiable de
            información y también la máxima fuente de amor. No dañes la autoestima de tus
            pequeños con adjetivos negativos. Mejor trata de hacer notar sus puntos fuertes en
            lugar de subrayar los negativos.
            "Me avergüenzas"
            Si tu hijo tiene la tendencia de llamar la atención en público, como gritar, brincar,
            correr y cantar a altos volúmenes de voz. Tal vez sólo necesite más atención. No
            digas  cosas  como  estas  frente  a  sus  amigos  y  tampoco  en  privado.  ¿Por  qué  no
            planear  un  espectáculo  en  casa  en  donde  él  sea  la  estrella  principal?  Tal  vez
            descubran su lado artístico al hacerlo y pasar un buen momento en familia.



                                    "Ojalá nunca hubieras nacido"
            No puedo pensar en algo peor que alguien podría decir a un pequeño. Nunca, bajo
            ninguna situación, digas esto a tus hijos, ni siquiera en broma. Todos necesitamos
            saber que somos deseados y queridos, sin importar los errores que cometemos.
            "Me tienes harta, ya no te quiero"

            A veces, sin darnos cuenta, caemos en el juego de palabras de los pequeños. Tu hija
            de 3 años está frustrada porque no puede comer un segundo plato de helado para la
            cena. Después de explicarle varias veces por qué no debe hacerlo, se enoja, llora y
            te dice que no te quiere. La respuesta más fácil sería pagar con la misma moneda,
            pero esto sólo le causa daño a tu hija. La reacción correcta sería explicarle de nuevo
            por  qué  no  puede  comer  más  postre  y  recordarle  que  siempre  la  vas  a  querer,
            aunque  ella  esté  muy  enojada  contigo.  Ella  aprenderá  mucho  más  de  lo  que  te
            imaginas de esta lección.


                                      "No llores, no es para tanto"
            ¿Qué tan grandes pueden ser los problemas de los niños? Son sólo niños, ellos no
            tienen preocupaciones, aflicciones, disgustos ni miedos". Este es un error que como
            adultos  comentemos  muy  a  menudo.  Los  niños  tienen  tanta  o  mayor  capacidad
            emocional que un adulto. La diferencia es que no pueden expresarse ni calmarse a
            sí mismos como nosotros. Entonces, sus problemas de alguna manera ¿no serían
            aún  más  grandes? Nunca  minimices  un  miedo,  una  raspadura,  una  duda,  un
            conflicto  que  esté  pasando  tu  pequeño.  Ayúdalo  a  superarlo  y  a  reaccionar  de
            manera saludable ante él.



                                                                                             9
   5   6   7   8   9   10   11   12   13   14   15