Page 84 - Revista diciembre 2018.indd
P. 84

Jueves 27 Diciembre 2018

         Porque la Vida se hizo visible, y no-  ¡El Señor reina! Alégrese la tierra,
       sotros la vimos y somos testigos, y les   regocíjense las islas incontables. Nubes
       anunciamos la Vida eterna, que existía   y Tinieblas lo rodean, la Justicia y el
       junto al Padre y que se nos ha manifes-  Derecho son la base de su trono.      R.
       tado. Lo que hemos visto y oído, se lo
       anunciamos también a ustedes, para    Las montañas se derriten como cera
       que vivan en comunión con nosotros. Y   delante del Señor, que es el dueño de
       nuestra comunión es con el Padre y con   toda la tierra. Los cielos proclaman su
       su Hijo Jesucristo. Les escribimos esto   justicia y todos los pueblos contemplan
       para que nuestra alegría sea completa.   su gloria.                                            R.
       Palabra del Señor.                    Nace la luz para el justo, y la alegría
                                          para los rectos de corazón. Alégrense,
                                          justos, en el Señor y alaben su santo
                COMENTARIO                Nombre.                                          R.
         El testigo es el que ha visto u oído
         algo y lo manifiesta y lo defiende             ALELUIA
         ante quien se lo pregunte. Lo hace
         simplemente para  relatar lo  visto   Aleluia. A ti, Dios, te alabamos y
         u oído. El  testigo cristiano va un   cantamos; a ti, Señor, te alaba el coro
         poco más allá. No es solo aquel   celestial de los apóstoles. Aleluia.
         que fríamente expresa lo que ha
         visto, oído y vivido en su encuentro        EVANGELIO
         con Cristo Jesús. Busca también   Evan ge lio de nues tro Señor Jesu cris to
         que, a través de su testimonio, del    se gún san Juan 20, 2-8
         relato y vivencia de su experien-
         cia, aquel a quien se dirige llegue   El primer día de la semana, María
         a tener su misma experiencia. Así   Magdalena corrió al encuentro de Si-
         los testigos de Jesús de todos los   món Pedro y del otro discípulo al que
         tiempos y también, por tanto, sus   Jesús amaba, y les dijo: «Se han lleva-
         primeros testigos de los que nos   do del sepulcro al Señor y no sabemos
         habla esta  lectura. Nosotros,  los   dónde lo han puesto.»
         cristianos del siglo XXI, tenemos   Pedro y el otro discípulo salieron y
         que hacer otro tanto. Con nues-  fueron al sepulcro. Corrían los dos jun-
         tras palabras y, sobre todo, con la   tos, pero el otro discípulo corrió más
         experiencia de nuestra vida, de-  rápidamente que Pedro y llegó antes.
         bemos seguir testificando a nues-  Asomándose al sepulcro, vio las ven-
         tros hermanos a Jesús, el que es   das en el suelo, aunque no entró. Des-
         el Camino, la Verdad y la Vida, el   pués llegó Simón Pedro, que lo seguía,
         que puede llenar de esperanza y   y entró en el sepulcro; vio las vendas en
         de vida cualquier corazón humano,   el suelo, y también el sudario que había
         para que gocen de nuestra misma   cubierto su cabeza; este no estaba con
         experiencia.                     las vendas, sino enrollado en un lugar
                                          aparte.
                                             Luego entró el otro discípulo, que
                   SALMO                  había llegado antes al sepulcro: él tam-
         Sal 96, 1-2. 5-6. 11-12 (R.: 12a)  bién vio y creyó.

   82 R. Alégrense, justos, en el Señor.  Palabra del Señor.
   79   80   81   82   83   84   85   86   87   88   89