Page 90 - libro de los detalles plasticos en el arte romanico.Fernando Ezquerra Lapreta

 Las figuras de Cristo, Santo Tomás y San Juan Evangelista se desplazan a uno

de los lados del relieve ganando todo el protagonismo. Además, se les connota,
solo a los tres, de una manera especial respecto a los demás personajes. Son

las únicas tres figuras a las que se les práctico los huecos en los ojos para
introducir el azabache.

 La figura de San Pedro, a pesar de estar connotado con la llave, pierde
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protagonismo en la escena. De hecho, se coloca una representación de la figura
de San Pablo entre Cristo y San Pedro.

 Santo Tomás, con su mano izquierda, sujeta el brazo de Cristo, las dos figuras

interrelacionan.

Curioso el caso de Silos, ¿no? Sin embargo, está claro que, en los dos casos,
entienden perfectamente lo que tiene que realizar Santo Tomás con sus dedos. Y ese

momento esculpen. La simbología de los dedos como manifestación de un determinado

tipo de fe, la de naturaleza empírico-racional.

Por eso y para acabar, siempre que miramos esta iconografía de la duda de Santo
Tomás esculpida en uno de los relieves del claustro del Monasterio de Silos, nos

vuelven a sorprender algunos de sus detalles. Unos detalles que no dejan de llamarnos
la atención y que resumiríamos en tres preguntas finales:

1. ¿Por qué se equivocaron en Silos y representaron a doce (12) discípulos en lugar de
los once (11) del relato evangélico?

2. ¿Por qué se pone a San Pablo en lugar de San Matías para hacer el número doce,

cuando San Pablo no fue un discípulo evangélico? ¿Por qué se utiliza la figura de San
Pablo para desplazar a San Pedro del protagonismo de la escena?

3. ¿Por qué se olvidan de Santiago el Mayor, el Zebedeo, el hermano de San Juan
Evangelista, colocando por dos veces los nombres que hacen referencia a Santiago el
Menor, el hermano del Señor? Los monjes del Monasterio de Silos se olvidaron del

nombre, nada más ni nada menos, del Santiago al que los peregrinos de toda Europa

iban a visitar su tumba en Compostela. ¿Cómo se pudo producir este descuido, este
error entre gente culta? ¿No pasa uno de los ramales del camino hacia Santiago de
Compostela cerca del mismo monasterio?