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Tomado y adaptado del material Celebremos la recuperación, de John Baker.

Seguramente habrá escuchado la palabra “mentor”. Tal vez se esté preguntando
por qué necesita uno.

Existen tres razones por las que es vital un mentor:

1. Un mentor o compañero de rendición de cuentas es bíblico. Eclesiastés 4:9-12.
2. Un mentor o compañero de rendición de cuentas es clave para su programa de
recuperación y crecimiento.
3. Un mentor es la mejor protección contra la recaída. Proverbios 20:5.

1. Su actitud es correcta.
2. Crece con Jesús.
3. Expresa el deseo de ayudar en el crecimiento de otros.
4. Muestra compasión, cuidado, esperanza, y no lástima.
5. Es suficientemente fuerte como para confrontar si es necesario.
6. Ofrece sugerencias.
7. Es un buen oyente.
8. Puede contar sus propias luchas actuales a otros.

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