Page 78 - pasaporte a magonia jacques vallee
P. 78
78 JACQUES VALLEE PASAPORTE A MAGONIA 79
porque si bien es evidente que evolucionan, siguiendo fases, sus mulé de nuevo mi postulado básico: la creencia moderna y mun-
efectos son difusos y no pueden datarse con precisión. Tenemos dial en los platillos volantes y sus ocupantes es idéntica a una
que confiar en leyendas, relatos orales y extrapolaciones. No obs- creencia más antigua en las hadas. Los seres descritos como pi-
tante, es mucho lo que se podrá realizar cuando se llegue a la lotos de las naves no pueden distinguirse de los elfos, silfos y
comprensión de que la casuística cosechada desde la Segunda lutins de la Edad Media. A través de las observaciones de obje-
Guerra Mundial —los veinte mil informes sobre OVNIS, claros, tos no identificados, nos enfrentamos con algo que nuestros an-
coherentes y provistos de una fecha, que se conservan en los tepasados conocían muy bien y consideraban con espanto: nos
archivos oficiales y privados— no es más que el renacimiento de entrometemos en los asuntos de la Comunidad Secreta.
una profunda corriente de la cultura humana conocida en otros ¿Podemos afirmar con certeza que ambas creencias son idén-
tiempos bajo distintos nombres. ticas? Yo creo que sí. En los capítulos anteriores he dado ya al-
Como hemos visto, Wentz interrogó a varias personas de los paí- gunos ejemplos de los medios de transporte empleados por los
ses célticos que habían visto a la Buena Gente o que habían co- silfos. La habilidad que demuestran las hadas para cruzar los
nocido a personas que fueron arrebatadas por las hadas. En Bre- continentes no puede haber escapado a la sagacidad del lector. En
taña tropezó con dificultades mucho mayores: los capítulos que seguirán referiré algunas historias bastante sor-
prendentes acerca de las creencias que conservan los indios en
En el interior de Bretaña existe la creencia general de que razas voladoras y las naves aéreas empleadas por el Buen Pueblo
antaño existieron las fées, pero que éstas desaparecieron cuando para participar en guerras medievales. Pero aún no he extraído
la vida moderna se introdujo en la región. En la comarca del del folklore tradicional las historias que más directamente apoyan
Mené y de Erzé (Ille-et-Vilaine) se dice que durante más de un la idea de que durante toda la historia se han visto extraños ob-
siglo no se han visto fées, y en la costa donde aún se cree que jetos voladores en relación con el Pequeño Pueblo. Pero aclaremos
las fées solían habitar en ciertas grutas de los acantilados, la este punto ahora mismo.
opinión corriente es de que desaparecieron a principios del
siglo pasado. Los bretones más viejos declaran que sus padres
y sus abuelos decían a menudo que habían visto fées, pero muy
raramente dicen haberlas visto ellos. Paul Sébillot sólo encon- RAZAS AÉREAS: «FARFADETS» Y «SLEAGH MAITH»
tró a dos. Una de estas personas era una vieja calcetera de
Saint-Cast, que sentía tal temor a las fées que si tenía que salir
a realizar algunas de sus labores y se le hacía de noche al re- Hasta fecha tan tardía como 1850, sobrevivió en Francia una
greso, siempre daba un largo rodeo para no tener que pasar raza de lutins en la región de Poitou, que en años recientes ha
cerca de un campo conocido por el nombre del Couvent des sido zona predilecta de aterrizaje de los platillos volantes. Los
Fées. La otra era Marie Chehu, una anciana de ochenta y ocho lutins de Poitou se conocían por el nombre de farfadets, y la
años.* Biblioteca Nacional de París guarda varios deliciosos relatos de
sus malévolas acciones.
En el análisis del fenómeno OVNI, el problema central ha sido ¿Cuáles eran las principales características de los fadets o far-
siempre el de la inteligencia rectora oculta tras la conducta aparen- fadets? 4 Éstos eran hombrecillos muy negros y peludos. De día
temente deliberada de tales objetos. Al exponer el problema en permanecían ocultos en sus cuevas, para acercarse de noche a
estos términos, no supongo que los objetos sean reales... contra- las alquerías. Uno de sus pasatiempos favoritos consistía en gas-
riamente a lo que pudiera deducir quien leyera este libro con tar jugarretas a las aterrorizadas campesinas. Sus moradas se lo-
cierto apresuramiento. Pero de ningún modo excluyo la posibili- calizaban con bastante precisión. C. Piuchaud, por ejemplo, dijo
dad de que esta inteligencia rectora sea humana, e insistiré en esta en una conferencia que durante mucho tiempo vivieron farfadets
idea en capítulos posteriores. Permítaseme de momento que for- en La Boulardière, localidad próxima a Terves (Deux-Sèvres), en
túneles subterráneos que ellos mismos habían excavado . Los ha-
5
* Al investigar las creencias en las hadas, los elfos, o como quiera llamárseles,
se produce cierta confusión a causa de la gran variedad de nombres y clasificacio- bitantes de La Boissiere describen a los fadets como enanos ve-
nes dados a las diferentes razas de seres. Tan sólo en la Bretaña Inferior, Paul lludos que gastaban toda clase de bromas. *
Sébillot ha encontrado y catalogado cincuenta nombres distintos para los lutins y
las korrigans: aquéllos corresponden a los elfos, llamados pixies en Cornualles,
robin good-fellows en Inglaterra, goblins en Gales, goublins en Normandía, y brow- * El verbo «lutlner», que significa «portarse como un lutin», o sea, molestar con
nles en Escocia. N. del A. diabluras, ha sobrevivido en el Idioma francés. Se emplea para describir travesuras