Page 131 - I. Origen de los indios de Amrica. II.Origen y civilization de los indgenas del Peru
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     mercio con otras islas y  por ellas se comunicaba con nn
      continente, situado en la frontera, y el cual era vecino del
      verdadero mar.'* (1).
         Plutarco, en su Symposiacon; Séneca el Trágico, en su
     Medea, acto II: Tertuliano, en Hermógenes, cap. XXII y en
     'De PalHo, cap. IIj Luciano, en Hermotino; Orígenes, en Pe-
     ríarcoü, lib. II, cap. III; Pamelias, en Fallió, cap. II; Vossio,
     en Mathematicas, cap. XLII,   § X; Aristóteles, en su libro
     Bel Mundo; Rodigino, en sus Lecturas antiguas, lib. I, cap.
     XXII y lib. XYII, cap. XXXV; San Clemente, en su Epís-
     tola; San Jerónimo, en Ad Bphesios, lib. I, cap. II; y algu-
     nos otros autores notables de la antigüedad, como Cran-
     tor, Porfirio, Proclo, Marcilio, Ficio, Diodoro de Sicilia  y
     tantos otros concuerdan en que   *'  después db la Isla At-
     LANTIDA se NAVEGABA i- OTRAS ISLAS VECINAS Á LA TIERRA
     Continente y que después de ella se seguía el verda-
     dero MAR." Se colije de allí que las islas vecinas á la tierra
     Continente, son las conocidas de Cuba, Puerto Rico, Jamai-
     ca y otras; lá tierra Continente, es México y el Perú; y el
     verdadero mar, el Pacífico.
         Cuanto á la gran Tierra 6 Isla Atlántida que se cree
     •haya dado su nombre al Océano Atlántico (2), es conocida
     hoy únicamente por las controversias suscitadas éntrelos
     escritores antiguos y modernos sobre su existencia y el pun-



        (1)  Platón, al principio de su Timeo, dice que su tío Solón le informó
     de todos los detalles  referentes á la Atlántida,  y que éste obtuvo de los
     sacerdotes de Sais la relación de la historia de la Atlántida.  Crantor, cé-
     lebre académico y  primer comentador de Platón, asegura que esta historia
     es verídica, pues está confirmada por el historiador Marcellus, que probó
     que en el Océano Atlántico existían entonces siete islas consagradas á Pro-
     serpina, otra á Plutón, otra á Ammón y otra á Neptuno, ejerciendo esta
     última una autoridad absoluta sobre las demás.
        (2)  El Océano Atlántico, según Platón, en la primera parte de su diá-
     logo Crisiás, recibió este nombre de Atlante, rey de la Isla Atlántica.
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