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S proceso comienza con la cría del borrego al que
i existe magia, color y misticismo es en la
usanza tradicional de las nobles mujeres
de San Miguel Tenango, población de
origen náhuatl, que conserva la conexión
entre el arte, el uso del color y la cultura de las
abuelas en el porte de esta indumentaria, orgullo
de una casta que se niega a perecer aun con los
modernos modelos de boutique y las pasarelas de
todo tipo de vestimenta en las calles.
Portar cada una de las prendas que conforma el
traje es un ritual que se comparte entre mujeres
dignas de usarlo ya que para colocarse, se
necesita de la ayuda de otra portadora que sepa
como maniobrar para que quede en la posición
exacta tanto la nahua y la faja que la sostiene. Así
se ha hecho y seguirá haciéndose mientras haya
nobles portadoras de estos conocimientos.
El significado de cada prenda que constituye
este traje nos habla de la profunda conexión con
la madre naturaleza, la feminidad, el respeto, y la
mística del lugar al que representa ya que el
simbolismo es claro cuando tenemos la
oportunidad de contemplar y tocar cada prenda
elaborada con paciencia y los materiales que dan
vida a cada forma y elemento uniendo a una
comunidad rica en costumbres y tradiciones.
Figura 1. Danza autóctona con el traje típico. Fuente:
fotografía de Diana Laura González Rodríguez (2025).
El mundo nahua es un pueblo ligado a la tierra, a
sus frutos a su madre Tonantzin y se refleja en sus
elementos y detalles aún guardados en la
memoria y visibles para quien sabe observar. Se
puede iniciar con uno de sus principales aportes a
la indumentaria: faldón o enaguas donde el
Año 11 Núm. 32 mayo-agosto 2025
se cuida con esmero ya que se debe nutrir de la
madre tierra quien obsequia hierba, granos y pasto
pastor llegado el momento trasquilara para
de los que se alimentan los rebaños a los que el
obtener la lana a utilizar y mediante el lavado,
tratado para hacer fibras y teñido oscuro dará
lugar a las enaguas o nahuas que místicamente
simbolizan a la tierra de la que emana la vida para
el planeta, ya que sin ella no habría árboles,
animales ni humanidad. Al mismo tiempo, la
nahua cubre y protege el vientre de las mujeres de
donde emana la vida; es por ello que se utiliza el
vivo color negro de la tierra, además de que la
lana de borrego es sabido que protege de las
inclemencias del ambiente dado que el clima en
esta región es templado húmedo y en invierno es
inevitable el frío, por lo que el uso de estos
materiales son la mejor opción por ser una región
de bajas temperaturas.
El elemento que sostiene a las enaguas es la faja
en color blanco y negro, hecha en telar de cintura
donde se hilan con cariño y tenacidad, ya que
serán las que estarán alrededor del vientre y
sostendrán a la nagua, por lo que la consideran la
conexión entre el cielo y la tierra. En este momento
es necesaria la ayuda de otra mujer que sepa
hacer el amarre de la faja sobre la nahua lo que se
convierte en un momento de compartir, ya sea
con la madre que enseña a su hija a cómo usar
estos elementos, o una familiar como una tía,
prima o cualquier otra mujer. En ocasiones hasta
las amigas participan de este amarre donde
existe conexión.
Figura 2. La faja en color blanco y negro que amarra la
nahua. Fuente: fotografía de Diana Laura González
Rodríguez (2025).
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Tlahuizcalli ISSN: 2448-7260